Rodolfo Barra, flamante designado por el presidente electo, Javier Milei, como próximo Procurador Nacional del Tesoro, arrastra consigo el haber integrado la Corte Suprema de la "mayoría automática menemista", de la cual debió renunciar tras haberse descubierto un pasado juvenil filonazi. Además, se trata de un fuerte militante antiaborto.
Barra fue, en su juventud, parte de la Unión Nacionalista de Estudiantes Secundarios. Se trata de una organización militante vinculada al Movimiento Nacionalista Tacuara, que surgió en el país a fines de los años 50 reivindicando una ideología de corte filo fascista. De hecho, el designado procurador del Tesoro admitió haber sido parte de esa organización.
Además, el ex funcionario colaboró y fue cercano al rector interventor de la UBA Alberto Ottalagano, quien durante su gestión, en 1974, restableció el ingreso restrictivo y los cupos, mientras que persiguió y despidió a miles de docentes y trabajadores no docentes. En esos meses, también, accedieron a los decanatos representantes de los sectores más conservadores del catolicismo, y se incrementó la vigilancia y la persecución de la comunidad educativa con gendarmes, policías y celadores en los claustros universitarios.
Durante los 100 días de gestión de Ottalagano, y como consecuencia de sus medidas represivas, murieron 11 estudiantes y otros 4 fueron desaparecidos. Mientras tanto, Rodolfo Barra siguió siendo delegado interventor en la Escuela de Servicio Social hasta 1977, durante dictadura militar.
En 1990 asumió como ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que pasó a ser conocida como la Corte de la "mayoría automática", debido a que el entonces presidente, Carlos Menem, amplió el número de miembros del tribunal de forma que, con los nombrados por él, se garantizara que hubiera una mayoría que fallara a su favor.
Sin embargo, Barra debió renunciar en 1993, solo tres años después, debido al escándalo que se generó al descubrirse la pertenencia a organizaciones filofascistas durante su juventud. Los medios de aquella época también señalaron que, entre los motivos de su renuncia forzada, estuvo también su aparente responsabilidad en el estancamiento de las causas por los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA.
Tras renunciar como juez de la Corte, fue rescatado por el propio gobierno de Menem, quien en 1994 lo nombró ministro de Justicia de la Nación, cargo que ocupó hasta 1996. Fue el autor de la llamada "Ley Mordaza", un proyecto que limitaba la libertad de prensa.
Su trayectoria dentro del menemismo no terminó ahí. Un año después de su salida del Ministerio de Justicia, Barra fue designado por decreto "para abogar por el derecho a la vida, desde la concepción", como asesor del Presidente en la protección de 'los derechos de la persona por nacer.
Esa misma posición fue la que defendió en 2018 y 2020, cuando fue citado por congresistas anti aborto en los debates en comisión que se dieron previo al tratamiento de la ley de interrupción legal del embarazo, finalmente aprobada tres años atrás.