El presidente Javier Milei defendió este lunes los monopolios, tal como había hecho en su polémico discurso en la cumbre de Davos un mes atrás. Esta vez lo hizo en Corrientes, en una exposición por el décimo aniversario de la Fundación Club de la Libertad, un espacio libertario de la provincia.
Su defensa a los monopolios se dio en el marco de su explicación de por qué pasó de coincidir con la teoría neoclásica de la economía hacia la Escuela Austríaca. "La teoría neoclásica dice que lo que pasó en los últimos 224 años es malo. Y eso es bastante loco, porque si yo tomo las condiciones de pobreza extrema, es decir gente viviendo con menos de un dólar diario, el número pasó del 95% a 5%", comenzó su explicación.
"Tuve la dicha de uno de los analistas que tenía en el equipo, que había sido alumno mío en UADE, me trajo el artículo 'Monopolio y competencia' de (Murray) Rothbard, cuya traducción la hizo el papá del prócer, es decir Alberto Benegas Lynch padre", siguió Milei, y, para defender los monopolios, recordó: "Cuando lo terminé de leer dije 'todo lo que enseñé de estructuras de mercado está mal'". Los economistas neoclásicos dicen que los monopolios "son malos", según el Presidente, frase que cuestionó.
Además, defendió el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que firmó hace dos meses, apenas asumido en su cargo. "Argentina con 210% de inflación, con la inflación en la punta corriendo 17.000%, con 47% de pobres como ahora ha dibujado la UCA (el informe dice que la pobreza es del 57%) y demás. ¿Eso no eran condiciones de necesidad y urgencia? Están mirando la película en otro lado", justificó.
Qué había dicho Milei en Davos sobre los monopolios
Durante su discurso en el Foro de Davos, el Presidente ya había defendido la existencia de los monopolios. "El dilema que enfrenta el modelo neoclásico es que dicen querer perfeccionar el funcionamiento del mercado atacando lo que ellos consideran fallos. Pero al hacerlo, no sólo abren las puertas del socialismo, sino que atentan contra el crecimiento económico. Ejemplo, regular monopolios, destruirles las ganancias y destrozar los rendimientos crecientes, automáticamente destruiría el crecimiento económico. Dicho de otro modo, cada vez que ustedes quieran hacer una corrección de un supuesto fallo de mercado, inexorablemente, por desconocer lo que es el mercado, o por haberse enamorado de un modelo fallido, están abriendo las puertas al socialismo y están condenando a la gente a la pobreza", dijo en aquel momento.
Además, en ese discurso agregó: "Hoy los Estados no necesitan controlar exactamente los medios de producción para controlar cada aspecto de la vida de los individuos. Con herramientas como la emisión monetaria, el endeudamiento, los subsidios, el control de la tasa de interés, los controles de precios, las regulaciones para corregir los supuestos fallos de mercado, pueden controlar los destinos de millones de seres humanos".