Gobernar sin gabinete, asumir sin funcionarios

13 de mayo, 2024 | 09.50

Una característica de estos pocos meses en la administración del presidente Javier Gerardo Milei, ha sido la alta rotación de funcionarios en cargos importantes en las primeras o segundas líneas de la Administración, lo que no solo significa desacuerdos internos o pases de factura, sino algo mucho más profundo, que es un gobierno que asume sin plan ni idea de gestión. 

En las elecciones presidenciales argentinas del año 2023, la formación política que llevó como presidente a Milei como líder de La Libertad Avanza, y que ganó en segunda vuelta con el 55,65 % de los votos válidos escrutados, era una coalición de partidos preexistentes, en general partidos que nunca participaron electoralmente en forma solitaria, sino en alianzas o coaliciones para preservar su personería electoral. Estos partidos fueron el Partido Demócrata, el Partido Libertario, el partido Fuerza Republicana, la Unión Celeste y Blanco, el Partido Fe, y el Partido Renovador Federal.  Algunos de ellos son partidos con una larguísima tradición ideológica y política, como el Partido Demócrata - formación política que gobernó la República hasta la reforma electoral de Sáenz Peña y el ascenso radical -, y otros son organizaciones fundadas en torno a una persona como es el caso del Partido Fuerza Republicana, fundado por el general Antonio Bussi, o el Partido Fe, fundado por el sindicalista agrario Gerónimo Venegas. 

En un sistema presidencialista, claramente quien gobierna es el presidente. Pero la gestión la lleva a cabo un amplio conjunto de funcionarios que integran el gabinete nacional: la secretarías, subsecretarías, direcciones nacionales, direcciones de línea, unidades coordinadoras, etc., así como la gestión de los organismos descentralizados. Es decir que ganar una elección, implica tener armado un cuerpo de futuros funcionarios y programas específicos para cada área de gobierno. Por ello la Ley Orgánica de los Partidos Políticos Ley N° 23.298, en su Artículo 2 sostiene: 

Los partidos son instrumentos necesarios para la formulación y realización de la política nacional. Les incumbe, en forma exclusiva, la nominación de candidatos para cargos públicos electivos. 

Es decir, los partidos políticos no son solo un medio para lograr un objetivo, al mismo tiempo son un medio para la formulación de políticas públicas. Un partido político debe tener instrumentos para gestionar información y evaluar planes de desarrollo específicos para cuando se hagan del gobierno, así, por ejemplo, la Coalición Cívica tiene al Instituto Hannah Arendt, y la alianza política que conforma el Partido Justicialista tiene al Instituto Patria. Se trata de que los partidos políticos constituyan planes de gobierno programas específicos de acción para cada área o departamento, y cuando un nuevo gobierno asume el poder ya tiene diagramada la estructura de su funcionariado, y sus planes básicos de gestión. Pero esto no ha pasado en la alianza de partidos que acompañó a Milei en las recientes elecciones. Y esto se ha evidenciado con la enorme cantidad de funcionarios que han renunciado o fueron el despedidos en las primeras semanas de gestión, lo que muestra una improvisación muy peligrosa al momento de llevar a cabo una acción de gobierno. Entre los que han perdido sus cargos están: 

 

Pablo Rodríguez Subsecretaría de Políticas Sociales de la Secretaría de Niñez y Familia, 

Geraldine Calvella Dirección de Fiscalización de Centros de Documentación del Registro Nacional de las Personas (Renaper),

Ricardo Spartano, Secretaría de Coordinación Legal y Administrativa en el Ministerio de Capital Humano,

Sebastián García de Luca, Secretario de Articulación Federal de la Nación Argentina 

Flavia Royón, Secretaria de Minería, 

Osvaldo Giordano, titular de ANSES

Guillermo Ferraro Ministerio de Infraestructura

Ricardo Schlieper, Subsecretaría de Deportes.

Eduardo Roust Subsecretaría de Comunicación (designado)

Maximiliano Keczeli Secretaría Legal y técnica del ministerio de Capital Humano

Mariana Hortal Sueldo Subsecretaría de Relaciones del Trabajo

Armando Guibert Transformación del Estado y Función Pública, 

Julián Suárez Director de Control y Fiscalización Pesquera, 

Geraldine Calvella, Dirección de Fiscalización de Centros de Documentación del Registro Nacional de las Personas (Renaper),

Alejandro Guglielmi, jefe de la Casa Militar

Omar Yasín, Secretaría de Trabajo

Juan Caruso director de Comunicación nacional

Belén Stettler, Secretaría de Medios

Ricardo Spartano Secretaría de Coordinación Legal y Administrativa en el Ministerio de Capital Humano

A ellos se suma que en muchas direcciones del ANSES o de la AFIP, todavía se mantienen en sus cargos directivos y funcionarios de la anterior administración, y que hay ciertas plazas de la Administración Pública Nacional en las cuales no se han designado todavía los funcionarios responsables. 

Pero esta postura habla de una peligrosa concepción de la gestión pública, según la cual se fija una única prioridad -el superávit nominal del presupuesto -, como labor del gobierno, una única señal para que todo el resto se ordene y funcione automáticamente. Pero esto es renunciar a la gestión pública, y esto debilita enormemente la calidad política y capacidad de gobernabilidad de la nación, por ende, el bienestar de nuestra sociedad. 

Parece ser esta la concepción dominante del libertario no nos lleva hacia un buen puerto, y por consiguiente podríamos decir que estamos en una nave con capitán y sin timonel lo cual sería muy preocupante, ya que pasa a ser muy alta la posibilidad de naufragar.