El gobierno de Javier Milei sigue definiendo sus casilleros para los distintos puestos en la gestión, entre estos los puestos de las embajadas. Este martes se confirmó una de las representaciones diplomáticas clave en las relaciones de Argentina con el mundo. Milei ya tiene el Ok. para su embajador en China, país con el que tiene que sostener vínculos económicos, que incluyen un swap de reservas, pese a declaraciones furibundas del Presidente en su campaña contra el gigante asiático y su anuncio de romper relaciones diplomáticas por su condición de "comunista".
En efecto, China aceptó la propuesta del gobierno de Milei para que Marcelo Suárez Salvia sea el embajador argentino en el país asiático. Diplomático de carrera, el sucesor de Sabino Vaca Narvaja cumplía funciones en Trinidad y Tobago y, durante el gobierno de Mauricio Macri, estuvo en la embajada de Canadá.
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Pese a las tensiones con Milei, que fueron suavizadas tras la campaña, el Presidente y su canciller Diana Mondino recibieron una aprobación en tiempo récord de parte de China al embajador propuesto. Semanas atrás, fuentes que tienen conocimiento ya daban por hecho que Suarez Salvia era número puesto para ser el representante en Beijing.
“Estamos dispuestos a trabajar con el nuevo gobierno de Argentina para el desarrollo sostenido y estable de la asociación estratégica integral China-Argentina”, sostuvo la portavoz de la Cancillería china, Mao Ning, cuando le consultaron por el vínculo con la gestión de Milei, luego de su asunción.
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Más allá de la pirotecnia verbal del Presidente en campaña, aparece como un obstaculo en el horizonte la renovación del swap con China. Este -prácticamente- representa la totalidad de las reservas brutas del Banco Central: unos 18.200 millones de 21.400 millones en total, según el cálculo del grupo GERES, aunque estima además que, de ese total prestado, hoy solo queda aproximadamente el equivalente a unos 12.000 millones de dólares (nominados en 95.000 millones de yuanes). Cabe recordar que Milei llegó al poder con la promesa de instaurar una dolarización de la economía.
Luego de la asunción, el Gobierno anunció el envío al Congreso, en las sesiones extraordinarias, de un proyecto para la "eliminación de la Doble Imposición con respecto a los Impuestos sobre la Renta y sobre el Patrimonio" para las empresas de origen chino. Este guiño a China se vio empañado por la viralización del diputado provincial bonaerense Agustín Romo recibiendo un regalo de 300 pan dulces de parte de la Oficina Comercial de Taiwán.
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