El acuerdo de la Unión Europea con el Reino Unido deja afuera a las Malvinas

La decisión fue recibida por el gobierno argentino con una "prudente satisfacción".

26 de diciembre, 2020 | 17.05

El acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Reino Unido luego de Brexit deja afuera de las negociaciones a las Islas Malvinas. La decisión favorece a la Argentina que tiene un nuevo argumento para pedir por la soberanía de las islas ocupadas de forma ilegal. Desde el gobierno argentino informaron a El Destape que recibieron la noticia de la exclusión de las Malvinas del acuerdo con una "prudente satisfacción". 

La resolución a la que tuvo acceso a El Destape indica que el acuerdo comercial que comenzará a regir a partir del 1 de enero no se aplicará para los territorios de ultramar que tiene una vinculación con el Reino Unido. Entre las islas que mencionan están las Malvinas y también las islas cercanas Georgias del Sur y Sandwich del Sur. 

De esta forma, los habitantes de las Malvinas ya no gozarán de los beneficios que tenían como el acceso a productos como la pesca y la carne sin los costos de los impuestos. 

La UE y Londres llegaron a un acuerdo sobre su futura relación comercial para evitar un Brexit brusco que impacte en las economías golpeadas por el coronavirus, apenas días antes del plazo del 31 de diciembre que las partes se habían dado cuando el país salió del bloque. El texto legal del nuevo tratado, que tiene más de 1.200 páginas, había sido presentado por el negociador europeo, Michel Barnier, a los embajadores de los Veintisiete que por primera vez en la historia fueron convocados a una reunión el día de Navidad.

Este histórico acuerdo comercial llega cuatro años y medio después del referéndum de 2016 en el que los británicos decidieron por 52% de los votos poner fin a casi cinco décadas de una tensa relación con la UE y convertirse en el primer país que abandona el bloque. Aquella votación dividió a la población y a sus políticos. Provocó la dimisión, primero, del primer ministro conservador David Cameron y, después, de su sucesora Theresa May.

El pacto finalmente será menos ambicioso de lo que la UE aspiraba, pero permitirá una relación comercial sin cuotas ni tarifas a condición de que Londres asuma reglas igualitarias en materia de competencia y otras salvaguardas. La negociación contra reloj se concentró en las últimas semanas en las diferencias en materia pesquera, una cuestión de poco peso económico pero importante en lo político y en lo simbólico, ya que ponía en juego el apoyo de las comunidades costeras y parte de su soberan