El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, oficializó su candidatura a la presidencia del Partido Justicialista (PJ) y presentó la lista de dirigentes que lo acompañarán en esta contienda interna. En la primera vicepresidencia figura Magda Ayala, intendenta de Barranqueras, Chaco, seguida por el exgobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, como vicepresidente segundo. La tercera vicepresidencia estará a cargo de Mariana Gadea, secretaria gremial de UPCN en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que Roque Álvarez, presidente del bloque peronista de la Legislatura tucumana, ocupará la cuarta vicepresidencia. Finalmente, Alba Sánchez, intendenta de La Viña, Salta, completará la nómina en la quinta vicepresidencia.
La presentación se dio en medio de un clima político marcado por tensiones dentro del PJ, con Quintela confirmando que disputará la conducción del partido con Cristina Fernández de Kirchner, una decisión que, según dijo en la previa, "lamenta pero considera necesaria".
En una entrevista radial, el gobernador explicó que la situación requiere "bajar los tonos" y establecer puentes de diálogo entre los distintos sectores del peronismo. A su vez, advirtió que la unión dentro del movimiento es clave para enfrentar el gobierno de Javier Milei, el cual, afirmó, "avanza sobre los derechos de la mayoría absoluta de los ciudadanos".
Quintela destacó la necesidad de renovar la dirigencia peronista y adecuarla a los nuevos desafíos que plantea la coyuntura política actual. Según el gobernador riojano, el problema del peronismo no es Cristina Kirchner, sino el "cansancio" que los ciudadanos han mostrado hacia la política, como se evidenció en las últimas elecciones. Reconoció que parte de ese desgaste recae también sobre él y otros dirigentes, aunque se consideró en una mejor posición que algunos de sus colegas por ser menos conocido a nivel nacional.
El mandatario también hizo un llamado a reformar las prácticas y métodos dentro del PJ, destacando la importancia de cambiar la manera de comunicarse con la sociedad. "Hay un cansancio con cierta dirigencia y es hora de hacer una renovación en el peronismo, como en todas las fuerzas políticas", expresó. Además, resaltó que su objetivo, en caso de asumir la conducción del partido, sería facilitar el surgimiento de nuevas generaciones de dirigentes, capaces de construir un proyecto que supere los límites actuales del Movimiento Nacional Justicialista.
Quintela no escatimó en elogios hacia Axel Kicillof, a quien describió como un "compañero" que está desempeñando un rol clave en la política argentina actual. Sin embargo, negó haber buscado su apoyo en la interna del PJ, y subrayó que el gobernador bonaerense debe ser protegido y cuidado, ya que es una de las principales figuras del peronismo en este momento.
Por otro lado, el gobernador de La Rioja lanzó duras críticas hacia la gestión de Javier Milei, a quien acusó de implementar políticas que están llevando al país a una crisis insostenible. "Esto de Milei no se soporta más, la sociedad no lo soporta", afirmó Quintela, advirtiendo sobre las posibles consecuencias de los ajustes y recortes que está aplicando el gobierno libertario. Además, advirtió sobre el riesgo de que se produzca una fuerte reacción popular si la situación no mejora. Según Quintela, el pueblo argentino está llegando a un límite insostenible debido al aumento de los costos de vida, y si el gobierno de Milei no actúa con rapidez, podría enfrentar un estallido social.