El gobierno de Alberto Fernández definió modificaciones en torno a la Hidrovía y ahora será el Estado el que asuma mayor control sobre la Vía Navegable Troncal. Como anticipó El Destape, se publicó en el Boletín Oficial el decreto que habilita una "licitación corta" por el plazo de un año para la realización de obras de mantenimiento y que estará a cargo de la Administración General de Puertos (AGP). Otro punto destacado y que exhibe una mayor presencia estatal será el cobro de una tarifa o peaje a las navieras que la utilicen.
El decreto lleva la firma del Presidente, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y el ministro de Transporte, Alexis Guerrera. De cara al vencimiento de la prórroga de la concesión de Hidrovía S.A. (conformada por el grupo belga Jan de Nul y el holding argentino Emepa S.A.), se le otorgó la concesión de la operación "para el mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado y redragado y el correspondiente control hidrológico" de esta vía navegable a la AGP. Para ello, según reza el primer artículo de la norma, se modificaron las atribuciones del organismo que depende del Ministerio de Transporte para que pueda "concesionar obras y/o la administración, prestación de todo tipo de servicios de mantenimiento y operación de las vías navegables".
El lunes, en diálogo con El Destape Radio, Guerrera había confirmado el anticipo de este medio y que en este período de un año de licitación "ya comienza a funcionar el cobro del canon del Estado por parte del AGP y a través de la cuenta derivadora a la que ingresan, se le paga a las adjudicatarias de las tareas de dragado y balizamiento por las tareas realizadas".
Hidrovía: qué pasará después de un año
Para cuando finalice esta contratación corta, contó Guerrera, ya habrá "un ente nacional de control de la Hidrovía funcionando, que seguramente va a ser el encargado de la licitación grande". Esa futura licitación, sumó el funcionario, "ya va a contener las nuevas obras de mayor profundidad del dragado, el acceso a los puertos públicos, y demás, convirtiendo al nuevo ente de control de la Hidrovía prácticamente en una secretaría o ministerio que se dedique exclusivamente a tener presencia en la red troncal fluvial que es una arteria fundamental para la producción y el desarrollo de la Argentina".
De esta forma, se cumple lo que Fernández había anticipado semanas atrás en una entrevista con Pedro Rosemblat. “Hoy en día lo que sería el peaje de la Hidrovía lo cobra el concesionario y después le rinde cuentas al Estado. Lo que podríamos hacer es cambiar esa regla: que el Estado cobre el peaje y después le pague al concesionario”, afirmó en ese momento.
Mientras se desarrolla esta "licitación corta", el Ministerio de Transporte iniciará el llamado y adjudicación de la licitación de un período que probablemente no baje de dos décadas por el régimen de concesión de los 1.635 kilómetros de vía navegable troncal y que constituye un cauce por donde sale el 80% de la exportación nacional. Esa licitación, según mencionan fuentes oficiales, apunta a realizar "obras estratégicas como ensanche del canal, radas, zonas de maniobra y la incorporación de nuevos servicios y mejor tecnología al mantenimiento".
En ella se espera que el cobro del peaje siga en potestad del Estado. De esa forma, será un punto de equilibro entre los reclamos de las distintas partes del Frente de Todos. De hecho, en este punto coinciden tanto Fernández como el gobernador bonaerense, Axel Kicillof. A los dichos del Presidente antes mencionados, Kicillof había asegurado en mayo que ”las vías navegables tienen que estar bajo el control del Estado" y que éste "tiene que tener el control, la fiscalización y el cobro de los peajes de la Hidrovía".