Una vez más, el ex presidente Mauricio Macri volvió a negar la realidad. Esta vez aseguró que el derrocamiento de Evo Morales no fue un golpe de Estado y dijo que el envió de armas para la represión a opositores "nunca ocurrió".
En una de las tantas respuestas que dio Luis Majul, Macri aseguró que "lo de Bolivia fue un golpe que no existió y un contrabando que no existió. Ellos (por el Frente de Todos) van con su denuncia y la repiten". Esta mentira no es así y, por ejemplo, vale decir que durante el golpe de Estado en Bolivia se registraron masacres de fuerzas militares y policiales.
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Vale recordar que el envió de material bélico arribó a Bolivia en la madrugada del 13 de noviembre de 2019, justo un par de horas después de que el presidente de ese entonces, Mauricio Macri, le haya negado el asilo político a Evo Morales.
En las últimas semanas, por ejemplo, el legislador porteño de Juntos por el Cambio Claudio Romero cometió un brutal sincericidio al comparar el envío de armas para reprimir al pueblo boliviano tras el golpe de Estado a Evo Morales con el contrabando de armas de Carlos Menem. Luego de dar la respuesta, el legislador rogó que le hagan otra pregunta para no seguir con el tema. "Los elementos que se mandaron... fue una negociación de país a país como en la época de Menem se mandó...", afirmó Romero y en ese momento el periodista lo interrumpió para recordarle que Menem estuvo preso por el contrabando ilegal de armas a Ecuador, Croacia y Bosnia.
El futuro de Macri en las elecciones
"Yo me propuse desde el primer día correrme de cualquier competencia personal y focalizarme en esto porque no hay 23 sin 21 y el 23 tiene que tener muchas alternativas, hay varios dirigentes que quieren ser Papas", respondió. "Horacio (Rodríguez Larreta), Patricia (Bullrich), leí hace poco a (Gerardo) Morales, (Martín) Lousteau. Son varios. Necesitamos que entiendan la magnitud, no es fácil ser presidente y mucho más en Argentina", continuó.
"¿Renunció al sueño de volver a ser presidente?", preguntó Majul aunque no se encontró con un ampuloso adelanto de la eventual candidatura a presidente de su empleador. "Yo no dije que no, no voy a dar una opinión", lanzó.
Queriendo disuadir su deseo expreso, volvió a insistir con su trabajo pasivo en el partido de cara a las legislativas. "Hoy estoy para ayudar a todos. Hace falta un enorme esfuerzo de capacitarse. No se puede en 4 años dar vuelta la historia. Hay cuadros que hay que aprovecharlos", deslizó.