El Frente de Todos encabeza la intención de voto para las elecciones presidenciales de 2023 en la sumatoria de los posibles precandidatos, superando a Juntos por el Cambio por más de cuatro puntos. La vicepresidenta Cristina Kirchner y el presidente Alberto Fernández, en ese orden, son las figuras más elegidas dentro del oficialismo. El ex presidente Mauricio Macri y la ex ministra Patricia Bullrich son quienes más respaldos consiguen en la oposición, donde parece no haber lugar para las "palomas". De ahí tal vez la justificación del tour mediático que viene protagonizando el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta prometiendo reformas jubilatorias y laborales. Por último, Javier Milei y su partido se mantienen firmes como tercera fuerza, lo que garantizaría un escenario de ballotage.
Los datos surgen del último sondeo realizado por las encuestadoras Grupo de Opinión Pública, de Raúl Timerman, y Trespuntozero, de Shila Vilker, en todo el país. A la inversa de lo que sucedía en su medición de abril, en este sondeo de mayo la sumatoria de los posibles candidatos presidenciales del Frente de Todos alcanzó el 34,9% de intención de voto contra el 30,3% de Juntos por el Cambio y el 19,9% de Libertad Avanza en un primer escenario que incluyó a Macri. En un escenario "b", sin Macri en la medición, Juntos por el Cambio cae unas décimas que van directamente a los libertarios.
En lo referente a la interna de cada fuerza, puede llamar la atención -o no tanto- que sean los dos ex presidentes quienes encabecen las preferencias. "Hay una demanda social por alguien que tome decisiones y que mande. Y Cristina y Macri tienen poder de mando", explicó Timerman. Cristina Kirchner quedó al frente de los posibles candidatos del Frente de Todos con el 19,9%, seguida por Alberto Fernández con 10,7% mientras que Sergio Massa, Daniel Scioli y Eduardo "Wado" de Pedro aparecen bastante relegados. Timerman aclaró que en la encuesta se traza un escenario "casi de fantasía" por todo lo que falta para los comicios y porque -salvo el Presidente- nadie en el oficialismo expresó aún su voluntad de presentarse.
Una de las grandes incógnitas pasa por lo que hará la vicepresidenta. De acuerdo a este primer cuadro tendría buenas chances de resultar electa para un tercer mandato presidencial, pero el análisis cambia cuando se va al detalle sobre la aceptación de su candidatura. Un 58,8% sostuvo que no le gustaría que se postulara mientras que un 34,8% -casi calcado que la sumatoria del Frente de Todos- respondió de manera positiva. "Cristina está limitada en la cantidad de votos que podría llegar a reunir", analizó Timerman. Es ilustrativo el desglose de apoyos y rechazos. La vicepresidenta reúne las mayores simpatías entre los jóvenes de clase baja y media baja con educación primaria y la rechazan las personas mayores de clase alta con educación universitaria. La grieta real.
Resta saber si Cristina Kirchner puede trasladar esos apoyos a otro precandidato de su elección en caso de que decida no presentarse. En Juntos por el Cambio parece todo más claro porque, según este sondeo, Patricia Bullrich queda como principal receptora del elector de Macri, si es que el ex presidente desiste de ir por un "segundo tiempo". El rechazo a una eventual candidatura de Macri es todavía mayor que a la de Cristina -un 61,1% dijo que no le gustaría que se postulara- y la ex ministra de la mano dura surge como su heredera. Es revelador como las palomas -Rodríguez Larreta y los postulantes radicales- quedaron atrás.
Con Macri en cancha -el escenario "a"-, el ex presidente obtuvo un 9,8%, Bullrich 8,5% y Larreta 7% mientras que los tres radicales los siguen de lejos: Facundo Manes 3%, Alfredo Cornejo 1% y Gerardo Morales 0,7%. Sin Macri -el escenario "b"-, Bullrich subió al 14,6%, Larreta quedó en 9,4% y los radicales sumaron poco y nada. Unas décimas se van a Libertad Avanza que superó el 20%, con Milei con el 17,6% muy por encima de José Luis Espert con apenas un 2,7%.
Estos datos justificarían la aparición en escena de Rodríguez Larreta de los últimos días, con múltiples reportajes y actos con declaraciones fuertes, alejándose del rol moderado y componedor con el que hizo su carrera política. En papel halcón, el jefe de gobierno anticipó reformas drásticas, criticó al peronismo y al Presidente, buscando cambiar de imagen y atrapar esas simpatías del macrismo duro que le resultan esquivas.
Otro interrogante será saber qué hará el radicalismo ante esta derechización del mensaje en Juntos por el Cambio. La UCR buscará mostrar este viernes una señal de unidad en la designación de las autoridades de la Convención Nacional en la que ratificarán su vocación frentista pero con un mensaje de centro, así que el futuro de la principal coalición opositora es una incógnita. Lo del macrismo no parece tener vuelta atrás en su disputa de votos -o tal posible alianza- con los libertarios. Un dato significativo del trabajo fue que ante la pregunta de "¿quién le gustaría que fuera el próximo presidente?" Milei quedó en primer lugar con el 17,9%, confirmando su condición de nuevo jugador de la política argentina. Dos datos extras marcados por Timerman. Con un escenario dividido en tres, todo indica que en 2023 habrá ballotage. Segundo, los votantes de Milei irían 4 a 1 a favor de Juntos por el Cambio en esa hipotética segunda vuelta.