D'Alessiogate: la causa sumó un nuevo detenido por millonarios delitos financieros

Marcelo Patricio González Carthy de Gorriti estuvo un año en rebeldía y ahora se encuentra detenido por ser parte de una banda dedicada a colocar dinero en sociedades offshore para darle un manto de legalidad.

16 de septiembre, 2020 | 21.08

El D'Alessiogate sumó el procesamiento y prisión preventiva de un miembro de la banda que permaneció un año en rebeldía, Marcelo Patricio González Carthy de Gorriti. En este caso, vinculado maniobras delictivas financieras transnacionales por montos millonarios en moneda extranjera que, mediante el armado de diversos esquemas, colocaban en cuentas offshore con la intención de darles apariencia de legalidad. El grupo de Whatsapp “Buenos Aires”, dedicado a estos menesteres, estuvo activo al menos durante ocho meses y los mensajes se hallaron en el teléfono de Marcelo D'Alessio, el falso abogado y espía investigado por diversas extorsiones.

Según se desprende del expediente, la organización criminal clandestina y para–estatal que usó maniobras de espionaje ilegal tuvo su pata financiera. El Grupo Buenos Aires dejó en evidencia maniobras delictivas financieras transnacionales por montos millonarios en moneda extranjera, con énfasis en el rol desplegado en esas actividades ilícitas por Marcelo Patricio González Carthy de Gorriti, quien las proponía. Para realizarlas, se requerirían de los “servicios” de Pablo Leonardo Bloise, sostuvo el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla.

Los mensajes hallados en el celular de D'Alessio dejaron en evidencia el carácter ilegal de las maniobras ya que hubo intercambios en los que los involucrados refirieron haberse reunido “con la persona que referencié en nuestra comida del sábado” o manifestaron “las razones que no las puedo expresar por acá”. Como contrapartida por los “servicios” prestados, los personajes implicados obtuvieron “cuantiosas comisiones a través de Paymasters, esto es, empresas que gestionan cobros en nombre de terceras personas cuya identidad no se expresa en la documentación de las operaciones”. En el caso de este grupo particular, sostiene el escrito, “todos cobrarían del mismo paymaster y que se trataría de la empresa Goldmax Development Limited, una empresa que surge vinculada a los Panamá Papers”.

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En su resolución, a la que tuvo acceso El Destape, el magistrado dictó el procesamiento y prisión preventiva de Carthy de Gorriti por encontrarlo penalmente responsable del delito de asociación ilícita dedicada a efectuar de forma habitual, organizada, con división de roles específicos y de manera estable en el tiempo, transferencias financieras internacionales a sabiendas del origen ilícito de los fondos y con la finalidad de simular dicho origen ilícito, dar apariencia de licitud a los mismos y ponerlos en circulación en el mercado; ello en carácter de miembro. En julio de 2019 había hecho lo propio con D’Alessio, Ricardo Bogoliuk y Bloise. Las operaciones fueron detalladas en mayo de este año y explicadas por Franco Mizrahi en esta nota.

En esa ocasión, aclaró el juez, no se hicieron valoraciones sobre el rol de Carthy de Gorriti por encontrarse en estado de rebeldía, por lo que se esperó a que tomara conocimiento formal de las imputaciones en su contra y tuviera la oportunidad de realizar su descargo y ejercer el derecho de defensa. Más de un año después, el 2 de septiembre se presentó en la Comisaría Séptima de Pilar, donde fue detenido. Dos días más tarde tuvo lugar la audiencia indagatoria, pero se negó a declarar y, ante la falta de una hipótesis alternativa brindada por la defensa, se avanzó en la resolución de la situación procesal.

Según se desprende del expediente, actuaba en nombre de los “senders”, es decir, de los interesados en colocar sumas millonarias en la banca internacional, sin precisiones sobre el origen de esas sumas y de la identidad de quienes serían los reales titulares de los fondos. Al igual que el resto de los miembros de esta banda delictiva, percibía por sus servicios ilegales por intermedio de un “paymaster”, una comisión porcentual del total de las sumas involucradas. Ganancias espurias a partir de medidas delictivas previas.

Tras un año prófugo y con la investigación en marcha, el magistrado concluyó la existencia de una posibilidad real y concreta de que el imputado en libertad pudiera entorpecer la averiguación de la verdad y la continuidad del proceso o darse nuevamente a la fuga, lo que justificó el pedido de prisión preventiva.