“En casi 20 años de gestión de la derecha en la Ciudad, se construyeron más de 15 millones de metros cuadrados pero con una desigualdad tremenda. El norte compone el 50% de todo lo construido, al sur solo el 10% y lo loco, es que la cantidad de gente viviendo en la Ciudad es la misma. Es decir: misma gente, mucha construcción y el resultado es 400 mil personas viviendo en villas miserias”, detalló.
“Lo que pasó es que solo se construyeron torres de lujo, polos gastronómicos chetos y shoppings. Y no es noticia que cerca del 30% de las viviendas son ociosas, nadie las usa y no las ponen en alquiler. No es nada ilógico, es la lógica capitalista del mercado inmobiliario. El derecho a la vivienda es totalmente arrasado con tal de que llenen sus bolsillo. Y lo hacen con Larreta como administrador de ganancias y también, el PJ, nosotros no nos olvidamos del famoso pacto Pro-K”.
“Por un lado está Lousteau que propone “restaurar el Código Urbanístico” y Jorge Macri seguir el camino de Larreta, lo que hay que hacer es directamente derogarlo y terminar con todo este curro. Ese código es la entrega total del patrimonio de la Ciudad y solo beneficia a los grandes negocios inmobiliarios. Por el otro lado se encuentra el espacio de Santoro que propone “ayudar a los dueños de las oficinas olvidadas a convertirlas en viviendas accesibles”, parece inocente no nombrar que esas oficinas en pleno centro están para la especulación y que no necesitan ninguna ayuda del GCBA”, criticó Cele.
“Lo que proponemos desde el Frente de Izquierda: una Ley de Alquiler Social, con garantía y subsidio estatal, no lo propone nadie porque hay que tocar los intereses del lobby inmobiliario que tienen secuestrada la Ciudad y no deja que las grandes mayorías podamos vivir sin que el alquiler sea un sufrimiento. No puede ser que para entrar a un departamento tengas que dejar un ojo de la cara y después el alquiler mensual está muy por arriba del salario mínimo. 150 mil está hoy un alquiler ¡Larreta solo paga eso de expensas! Y otra cosa central, proponemos un impuesto especial a la vivienda ociosa. Esto ayudaría a empujarlas al mercado de alquileres y abaratar costos”, detalló.
También Cele Fierro recalcó que la propuesta no puede quedar solo en alquiler, “El Estado tiene que intervenir para asegurar la vivienda propia, hay que hacer un inventario de viviendas ociosas y declararlas de utilidad social. Si no alcanza, hay que construir viviendas para terminar con el déficit habitacional. La plata saldría del impuesto a la vivienda ociosa y también proponemos un ¨ABL premium¨ para las grandes empresas asentadas en la Ciudad. Así se hace una Ciudad para las mayorías”.