El presidente, Alberto Fernández, envió un guiño contra su par de Brasil, Jair Bolsonaro, al criticar este martes la tala en el Amazonas y sus consecuencias en el cambio climático, en medio de las elecciones en Brasil en las que apoyó a su rival y favorito para el balotaje, Lula da Silva.
Al referirse a las consecuencias del cambio climático, el mandatario sostuvo que "tenemos que empezar un proceso de reparación" para que el efecto invernadero "no se profundice". "Ahora se inician incendios que antes no ocurrían", agregó al respecto durante un acto por los 150 años de la creación del Servicio Meteorológico Nacional.
En el mismo sentido, se refirió a las sequías del río Paraná que comenzaron el año pasado. "El río Paraná registró la mayor bajante de su historia", señaló. Entonces, sin nombrarlo, envió una crítica a la política ambiental de Bolsonaro en Brasil en medio de la campaña para la segunda vuelta de las elecciones que se celebrarán en ese país el 30 de octubre.
"Cuánto tendrá que ver la tala en el Amazonas y la pérdida de espacios verdes", sostuvo respecto a los efectos del cambio climático. De este modo, apuntó contra uno de los principales cuestionamientos que recibe el presidente brasileño a nivel global. Según los reportes, desde que Bolsonaro asumió el gobierno la deforestación amazónica se aceleró para alcanzar su máximo nivel en 15 años.
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Ya en 2021, Fernández había criticado la política ambiental de Bolsonaro por la tala en el Amazonas cuando, también sin nombrarlo directamente, afirmó: "Hablamos del tema ambiental y sobre el problema de la Amazonia (con Jake Sullivan, asesor de Joe Biden en seguridad). Si no cuidamos los pulmones del mundo, el mundo se deteriora y se degrada y nosotros vivimos peor".
Incluso, la deforestación del Amazonas ya había sido una cuestión de Estado para Argentina en 2019, cuando el presidente de Francia, Emmanuel Macron, acusó a Bolsonaro de haberle mentido sobre sus compromisos ambientales en la cumbre del G20 en Osaka y advirtió que, en esas circunstancias, no refrendaría el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea. En los últimos años, Alberto mantuvo una relación cercana a Macron basada en sus coincidencias en materia climática y de género.
Las elecciones en Brasil y la agenda ambiental
Alberto Fernández ya se manifestó a favor del favorito a ganar en el balotaje, el expresidente Lula da Silva, quien ganó la primera vuelta con el 48,3% de los votos. "Felicito a mi querido Lula por su triunfo en primera vuelta y hago llegar mi sincero respeto al pueblo de Brasil por su profunda expresión democrática", posteó en Twitter el último domingo tras conocerse los resultados oficiales.
Lula, precisamente, sostiene la agenda ambiental como uno de los puntos importantes de su campaña y en su plataforma política se comprometió a luchar contra "los delitos ambientales promovidos por milicias, acaparadores de tierras, madereros y cualquier organización económica que actúe en contra de la ley (...) la deforestación ilegal y a promover la restauración de áreas degradadas y la reforestación de biomas".
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En marzo pasado, el líder del PT había tuiteado: "Si soy Presidente no habrá minería en tierras indígenas. Los indios no son intrusos, estaban aquí antes de que llegaran los portugueses. Tienen derecho a una vida digna y cuidar de la Amazonía es más importante que ellos buscando oro".
Pese a ser mundialmente criticado por su política ambiental, Bolsonaro la defendió hace dos semanas en su discurso ante la Asamblea General de la ONU. "En la Amazonia brasileña, con un área equivalente a Europa occidental, más del 80 % de la floresta continúa intocada, al contrario de lo que es divulgado por la gran prensa nacional e internacional", afirmó.