El acuerdo cerrado por Mauricio Macri con Horacio Rodríguez Larreta podría derivar en que las elecciones porteñas se voten el mismo día que las nacionales, pero con boletas separadas mediante algún sistema electoral diferenciado que aún se analiza. De esa manera, Rodríguez Larreta podría cumplirle a Macri la promesa que su primo será el único candidato a jefe de gobierno del PRO y también al radical Martín Lousteau acerca de que su candidatura presidencial no irá pegada únicamente a la de Jorge. Además, beneficia al conjunto de Juntos por el Cambio porque Javier Milei no tiene un candidato fuerte en la Capital y así conseguiría menos legisladores. El Frente de Todos, al tanto de la movida, observa sin opinar: es probable que también salga beneficiado.
Parte de que lo Macri negoció con Rodríguez Larreta antes de anunciar que se bajaba de la competencia presidencial fue que Jorge debía ser la única opción del PRO para la continuidad de los 16 años de gobierno que llevan en la CABA. El ex presidente fue muy crítico de los coqueteos del jefe de gobierno con el radicalismo y también de la proliferación de candidatos dentro de su propia fuerza, donde están lanzados los ministros Fernán Quirós y Soledad Acuña. El problema es que en esos escarceos de verano, que incluyeron la famosa foto "beatle" en Mar del Plata, Rodríguez Larreta le aseguró a Lousteau que la elección porteña sería en condiciones parejas, sin inclinar la balanza para el postulante del PRO.
La manera de congeniar ambas posiciones sería la de votar las elecciones porteñas el mismo día que las nacionales -ya no hay margen para desdoblar- pero con boletas separadas, incluso en diferentes mesas. Según las posibilidades que analizan, el artículo 60 del Código Electoral de la Ciudad le otorga la facultad al jefe de gobierno de tomar esa decisión incluso sin necesidad de pasar por la Legislatura. "En caso de considerarlo necesario, el Poder Ejecutivo podrá suscribir los acuerdos pertinentes a efectos de celebrar los comicios en la fecha prevista para las elecciones nacionales utilizando un sistema de emisión del sufragio distinto al vigente a nivel nacional". concluye ese artículo que describe cómo debe la Ciudad adherir a la simultaneidad con las elecciones nacionales.
La discusión que resta es a través de qué sistema diferenciado podría ser. Para el voto electrónico ya no hay tiempo porque esas máquinas se alquilan y luego hay que adaptarlas. Una posibilidad sería adoptar la boleta única de papel, un sistema que vienen impulsando ONGs afines al macrismo como el Cippec, que justamente ayer tuvo su cena anual, con Macri, Larreta y Patricia Bullrich en su mesa principal. Pero tampoco descartaban que no hubiera tiempo para eso y finalmente se dejara el sistema tradicional de boleta "sábana" de papel, pero con votación en mesas distintas o incluso en escuelas diferentes. Sería una rareza. Hay provincias que votan con sistemas diferentes, como Santa Fe o Salta, pero generalmente lo hacen en fechas diferentes.
El plazo apremia. El jefe de gobierno debe convocar a los comicios con una anticipación de al menos 120 días corridos, por lo que tendría hasta el 13 de abril para llamar a votar las PASO el 13 de agosto. Es decir, la cuestión debe resolverse en dos semanas. En Juntos por el Cambio comentaban que a Rodríguez Larreta también lo entusiasmaba la separación de boletas porque le permitía obstruir el acuerdo de Bullrich con Ricardo López Murphy, que iría como un segundo candidato a jefe de gobierno pegado a su boleta presidencial.
Pero lo que habría convencido a Mauricio Macri de aceptar la separación de boletas fue que esta alternativa baja el voto libertario, dado que el candidato a jefe de gobierno Ramiro Marra mide la mitad que Javier Milei como presidente en CABA. Según La Política Online, Rodríguez Larreta le explicó a Macri que si no separaban boletas, los libertarios podrían consolidar un bloque de 12 legisladores porteños que obligaría al próximo jefe de gobierno a consensuar con ellos cada votación en la Legislatura local. Hasta ahora, Juntos por el Cambio siempre gobernó a sus anchas con una cómoda mayoría propia. El ex presidente de Boca, Daniel "Tano" Angelici, que viene operando para Lousteau, se reunió con Macri el viernes y también le habló de las bondades de esta alternativa.
En el Frente de Todos siguen de cerca todas estas maniobras. "Es un rumor que se está corriendo. El jefe de gobierno para cerrar la PASO con Lousteau le va a entregar a los radicales esta posibilidad. No pasaría por la Legislatura ni nada, no tiene que ver con nosotros. Están viendo como resuelven la interna de Juntos por el Cambio", comentaba un dirigente del Frente de Todos porteño. Con todo, no lo mirarían con malos ojos. Le permitirían separar un poco la discusión porteña respecto a la elección nacional que está muy complicada, en especial en un distrito tradicionalmente adverso como es la CABA. Todo está por resolver en los próximos días.