Ya hay 12 gobernadores confirmados para la reunión del miércoles que viene en la sede porteña del CFI y esperan llegar a los 15 con los tres que aún no definieron. De los diálogos previos surgió una visión mayoritaria acerca de que, dada la delicada situación económica, sería mejor evitar las PASO y que el Frente de Todos resuelva su candidato presidencial por consenso. Para eso, preparan un documento en el que pedirán una reunión de la que participen Alberto Fernández, Cristina Kirchner, Sergio Massa, representantes de los gobernadores y de la CGT para decidir quién es el mejor candidato posible. Ya varios jefes provinciales se pronunciaron a favor de Eduardo "Wado" de Pedro, pero también Massa tiene sus adeptos.
El riojano Ricardo Quintela, que ya superó con éxito el test de las elecciones en su provincia, es quien más viene trabajando para la organización de la reunión. El fue quien reveló, en diálogo con El Destape Radio, que el encuentro se había adelantado casi una semana debido a la necesidad de apurar las definiciones en el oficialismo. Allí también recordó su posición contraria a las PASO, una mirada que es mayoritaria entre los gobernadores. De hecho, en algún momento los mandatarios provinciales impulsaron la suspensión de las primarias nacionales, pero no encontraron quórum suficiente. El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, que además es presidente del Congreso del PJ y fue facultado para firmar la inscripción de alianzas, es otro de los que tienen una mirada contraria a las internas.
"No hay unanimidad, pero sí mayoría", aclaraba uno de los gobernadores. Por ejemplo, uno de los que hoy cree que la mejor salida es la competencia interna es el gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, quien ya confirmó su participación en el cónclave. Pero la idea de una discusión puertas adentro para salir con un nombre que luego será defendido por todos es la que más atrae a los mandatarios con argumentos que coinciden con lo que vino expresando Massa en sus últimos actos. Que la situación económica no da para generar ruido político y dar lugar, por ejemplo, a nuevas corridas financieras. "Orden político para que haya orden económico", es la frase que acuñó el ministro y que los gobernadores suscriben.
La otra razón, que también esgrime Massa, es que con opciones divididas el candidato más votado individualmente resultará el libertario Javier Milei, lo que serviría para darle mayor volumen a su postulación. "Hasta ahora es un candidato que existe sólo en las encuestas, pero si queda primero de manera individual en las PASO la gente va a pensar que de veras puede llegar a ser presidente. Ahí se va a volver muy difícil bajarlo", razonaba un gobernador.En base a esos dos argumentos ganaba fuerza la idea de que del encuentro del miércoles saliera un documento proponiendo que se elija un candidato de consenso que pueda encolumnar a todo el Frente de Todos detrás suyo.
Para elegirlo reflotarán una opción que ya parecía descartada: una reunión entre los tres principales referentes del Frente de Todos. Pero, además de Alberto, Cristina y Massa, los gobernadores quieren tener una representación en el encuentro y plantearán que también esté la CGT. Algunos gobernadores -Quintela, Raúl Jalil, Gerardo Zamora- ponen sus fichas para esa candidatura de consenso a Wado de Pedro, con quien tuvieron la oportunidad de compartir viajes al exterior como los que hicieron a Israel y a Estados Unidos. "Sé que recorrió toda la República Argentina, provincia por provincia, distrito por distrito, que conoce la realidad, sabe lo que es el federalismo, sabe lo que hay que hacer y cómo conformar equipos para que lleven adelante un programa de gobierno”, le levantó la mano Quintela la última vez que visitó La Rioja.
El ministro del Interior multiplicó sus apariciones en la última semana con la intención de subir su nivel de conocimiento, de los más bajos entre los posibles postulantes. Además, adelantaban que en los próximos días Cristina dará señales más claras acerca de que él es su candidato. La mayoría de las encuestas miden al ministro individualmente, pero en las que lo hacen como el candidato de la vice, Wado duplica la intención de voto. Quieren profundizar esa mirada. Wado sumó apoyos esta semana también en sectores del peronismo ortodoxo de la mano del gastronómico Luis Barrionuevo y uno de los secretarios de la CGT, Carlos Acuña.
Es el encolumnamiento de los gobernadores más cercanos al kirchnerismo. Los mandatarios de partidos provinciales y de la región centro, en tanto, mostraron su predilección por Massa, a quienes todavía algunos ven con chances. El ministro acaba de volver de la visita a China junto a Máximo Kirchner en la que duplicó la disponibilidad del swap de monedas y dejó abierta la chance de ingresar en unos meses al banco de los BRICS.
La semana próxima será el turno de Washington, donde espera cerrar el acuerdo con el FMI para el adelanto de los próximos desembolsos con la posibilidad de utilizar parte de esos dólares para intervenir en los mercados y clausurar la posibilidad de una corrida. En cuanto a lo interno, en Economía piensan en una recomposición salarial (¿será el momento de la suma fija?) y en un congelamiento de precios por un tiempo. Con todo ese paquete atado, Massa mantiene latente la chance de una candidatura.
En el equipo de campaña de Wado calculaban que el ministro del Interior tenía el 90% de posibilidades de ser el candidato y que había un 10% de chances de que lo sea Axel Kicillof. Se sabe que el gobernador bonaerense no quiere saber nada y tiene todas las fichas puestas en su reelección, por eso en La Plata le adjudicaban ese 10% a Massa. En ese encuentro con Barrionuevo y Acuña, Wado les aseguró que él sería el candidato a presidente elegido por Cristina y que Massa irá como candidato a senador en la provincia de Buenos Aires. Como sea, la cosa está entre ellos tres y el orden tendría que quedar definido en ese encuentro entre los principales actores del Frente de Todos.
Había gobernadores que evaluaban que sus conclusiones servirían para, indirectamente, bajar la candidatura de Daniel Scioli, quien esta semana reiteró que sí o sí quiere presentarse en las PASO para competir contra el armado del kirchnerismo-massismo. Pero si ningún gobernador ni nadie de la CGT lo respalda, entendían, no le quedará otro camino que desistir. Lo que estaba descartado era que Cristina interviniera personalmente en la decisión, sino que será algo que deberá surgir naturalmente, por decantación. "Si nadie sale a apoyarlo se tiene que bajar", opinaba un gobernador. El "Pichichi" se mostró esta semana con la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, lanzada como candidata a gobernadora para competir contra Axel. En la misma situación que Scioli estaría el jefe de Gabinete, Agustín Rossi, el otro anotado en la grilla.
Hay gobernadores - también Wado de Pedro- que siguen atentos a la posibilidad de ampliar el Frente de Todos, que podría cambiar de denominación. Quintela planteó "recuperar" a quienes se fueron como Juan Schiaretti, Florencio Randazzo, Graciela Camaño y Emilio Monzó. Pero Schiaretti y Randazzo están jugados a sumarse a Miguel Angel Pichetto como la pata peronista de Juntos por el Cambio, sponsoreados por Horacio Rodríguez Larreta. Es una decisión que se discutirá este lunes en la reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio, donde las opiniones parecen estar muy divididas. Básicamente, el acuerdo les permitiría sumar los votos del peronismo cordobés.
Pero ayer el ex gobernador de Salta Juan Manuel Urtubey se diferenció y salió a aclarar que no formará parte de Juntos por el Cambio. "Soy lo que fui toda la vida, un militante peronista", destacó. Esta semana se mostraría en una actividad con Wado, a quien ya definió como "un dirigente súper interesante". Así que la posibilidad de una vuelta de Urtubey al redil del peronismo aparece probable y tal vez sirva para arrastrar a algún otro.