Con la renovación legislativa de 130 de las 257 bancas de la Cámara de Diputados y de 24 de los 72 asientos del Senado, el Congreso redefinió en las elecciones 2023 el tablero político, en un escenario clave para la gobernabilidad de la futura administración. La cámara Alta renovó en esta ocasión las bancas de los representantes de ocho provincias: Buenos Aires, Formosa, Jujuy, Misiones, La Rioja, San Luis, Santa Cruz y San Juan.
Allí, ninguna de las dos fuerzas mayoritarias, el oficialista Frente de Todos (FdT) y el opositor Juntos por el Cambio (JxC), ostentan la mayoría y la aparición de un nuevo actor político, La Libertad Avanza (LLA) de Javier Milei, que rompió el histórico predominio bipartidista.
En el Senado, el oficialismo ponía en juego 9 bancas y terminó ganando 11 llegando a un número total de 33 escaños. De esta forma queda a tres legisladores de conseguir el quórum y con la alianza de las mayorías. En tanto que Juntos por el Cambio ponía en juego 11 y ganó solo dos, el bloque fue el gran perdedor de las PASO reteniendo solo 24 bancas.
La Libertad Avanza no tenía senadores propios y consiguió 8 bancas, siendo la gran revelación de la elección pese a la derrota.
Así quedaría el Senado:
En la Cámara de Diputados, en tanto, se renuevan 130 de las 257 bancas que tendrán mandato desde 2023 y hasta 2027.
El peronismo tenía 118 bancas en diputados y retuvo 107, mientras que Juntos por el Cambio tenía 116 y retuvo 94. En tanto que la Libertad Avanza solo tenía cinco bancas y pasó a tener 38. La izquierda retiene las cuatro bancas que tenía y los interbloques dispersos reúnen a 14 legisladores.
Así queda Diputados:
Al igual que en la actualidad, en la Cámara de Diputados el peronismo quedó lejos del quórum propio y dependerá del consenso con la oposición más dura de Juntos por el Cambio o de los liberales para poder sancionar leyes.