El líder de La Cámpora y diputado nacional, Máximo Kirchner, realizó este viernes un guiño a las PASO dentro del Frente de Todos de cara a las elecciones 2023 al afirmar que la interna dentro del oficialismo debe resolverse mediante "elecciones, y que la sociedad defina".
Al ser entrevistado por militantes de La Cámpora durante la marcha por el 24 de marzo, Máximo destacó que el sector kirchnerista le fue "marcando a nuestro Gobierno, no con el diario del lunes sino con el diario del día, cada vez que advertimos que estaban los problemas. Lo fue diciendo Cristina o nosotros".
"A veces tenemos que saber clavar los tacos en el piso y decir 'no'", agregó en referencia a sus desacuerdos con el presidente, Alberto Fernández. En ese marco, ejemplificó que "el acuerdo con el FMI era malo y eso lo saben todos los argentinos. La curva de vencimientos agobia las cuentas de Argentina, y hay una sociedad que reclama más cámaras, patrulleros, hospitales...".
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Acto seguido, afirmó, todavía refiriéndose a sus desacuerdos con Alberto Fernández, que "cuando fuimos a torcer a favor de la gente, por diferentes motivos no se hizo. Y si alguien se enoja, se enoja. vamos a elecciones y la sociedad define".
De este modo, realizó un guiño a favor de definir las candidaturas del Frente de Todos mediante elecciones internas en unas PASO, una opción que es resistida por quienes apoyan que Cristina Kirchner finalmente decida postularse como candidata de consenso por ser quien mejor mide.
Máximo no se refirió a esta posibilidad sino que, al contrario, volvió a hablar de la situación de "proscripción" en la que se halla la expresidenta. "El macrismo decidió perseguir a la figura de Cristina creyendo que con ese desgaste la podían condicionar o hacer perder potencia electoral, pero (Cristina) hizo en 2019 lo que creyó y el peronismo ganó", relató el diputado. Y añadió: "Ahora sí la tienen que proscribir. No tienen que dejar que participe por las dudas porque saben de su potencia electoral".
También destacó la figura del expresidente Néstor Kirchner, a casi 20 años de su asunción como jefe de Estado y en tono de contraste con Alberto Fernández. "Cuando los dirigentes no confían en su pueblo, empiezan a tener miedo a todo. Cuando un presidente se pone al frente de los reclamos de la sociedad y tiene un propósito real, se pueden poder elecciones, pero se tiene la íntima convicción de construir una sociedad diferente", afirmó.