Mauricio Macri visitó al líder de La Libertad Avanza después del debate. Fue para repasar la fiscalización para el domingo. En sus últimos días de campaña de las elecciones 2023, Javier Milei pasará por dos provincias clave para Juntos por el Cambio, Santa Fe y Córdoba. En ambas, se espera que el libertario pueda hacer una diferencia importante, particularmente en las tierras mediterráneas, para intentar compensar lo cosechado por Sergio Massa en Buenos Aires.
En Rosario, el candidato presidencial va a comandar una de sus clásicas caravanas y realizará un acto en el Monumento a la Bandera, todo un símbolo de la ciudad. En Córdoba, dos días más tarde, estará en la zona de Patio Olmos, y le pidió a sus seguidores llevar banderas argentinas. Esa solicitud supo ser un distintivo en los afiches de Patricia Bullrich.
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Con mucho voto indeciso que terminará de definirse esta semana, Milei apareció arriba de Massa en Santa Fe. Estar en esa provincia antes del cierre de campaña demostró que todavía puede conseguir más votos para abultar el caudal, pero no tendrá una fuerte presencia de dirigentes aliados.
Bajo el paraguas de “Milei y su gente”, el libertario no tendrá acompañamiento de su casta amiga. Se podrá ver, en las calles, a Federico Angelini, diputado y ex presidente del PRO durante el período que duró la candidatura de Patricia Bullrich. El legislador irá a título personal. Del lado radical, el gobernador electo, Maximiliano Pullaro, y la senadora Carolina Losada, no tenían previsto participar.
El escenario en Córdoba
El jueves será el turno de Córdoba, la provincia clave del balotaje. Según los números opositores, Milei aventajará a Massa sin problemas, pero los cálculos oficialistas apuestan a un objetivo optimista. Si el libertario consiguiera 65% y el de Unión por la Patria un 35%, la matemática le sería favorable a Sergio Tomás. Por lo tanto, la fidelización de los sufragios será importante.
En las elecciones generales, Javier Milei quedó en primer lugar, desplazando a Juntos por el Cambio al tercer puesto. En el medio, Juan Schiaretti que este lunes se reunió con Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo. Ese mismo día, la diputada nacional electa por La Libertad Avanza, Lilia Lemoine, compartió un llamado a la insubordinación de las Fuerzas Armadas proclamado por Carlos Pampillón, procesado por ser cabecilla de una banda dedicada a realizar ataques antisemitas hace cinco años.
Para el acto de Córdoba, los referentes nacionales de Juntos por el Cambio todavía no tenían previsto asistir. Según se comentó, Milei fue el encargado de elegir esa provincia para cerrar la campaña dada la posibilidad de crecer en votos. Por eso, no concentró sus fuerzas en la difícil Buenos Aires.
La fiscalización, la principal preocupación
Los dirigentes opositores que eligieron confiar en la candidatura de Milei aclararon, en varias oportunidades, que no forman parte del comando de campaña libertario sino que le cedieron su apoyo electoral para la segunda vuelta. No sólo discursivo, sino también en la acción, sobre todo porque Bullrich espera que el 90% de sus electores siga el consejo de elegir al “peluca”.
“Tiene que haber un fiscal por cada mesa. Son 120 mil fiscales más 30 mil más que tienen que apoyar. Unas 150 mil personas que se tienen que movilizar”. Patricia Bullrich se reunirá con los voluntarios que custodiarán los votos de Javier Milei el 19 de noviembre, una masa de ciudadanos que, además, necesitará de una fuerte capacitación.
La reunión será después de las 18, en Colegiales, para reforzar el concepto de la importancia de fiscalizar en la segunda vuelta. Sobre todo después de que La Libertad Avanza haya definido no entregar el número máximo exigido de boletas para dejárselas a los escuetos voluntarios conseguidos para la custodia de los sufragios.
El sector de Juntos por el Cambio que decidió apoyar al libertario colaborará en territorio para lograr la finalidad de “cuidar la elección”, en el caso de los que decidieron no explicitar su postura, o fiscalizar directamente en favor de Javier Milei. Así lo definieron, por ejemplo, Cristian Ritondo y Diego Santilli en Buenos Aires en tándem con Jorge Macri – que no se pronunció a favor del libertario sino en contra del kirchnerismo – en la Capital Federal.
Pero la convocatoria no será suficiente para encarar la segunda vuelta. Uno de los inconvenientes más potentes para el libertario fue el de la capacitación de los fiscales. “Las planillas estaban confeccionadas con bastantes dificultades como para llenarlas, pero en todos los escrutinios definitivos, todos los partidos firmaron que en Argentina no hubo fraude”, dijo Bullrich en una entrevista con TeleDoce de Uruguay.
La dificultad para llenar planillas no obedeció al papel en sí sino a la falta de conocimiento de parte de quienes decidieron custodiar las voluntades de La Libertad Avanza, firmando los papeles antes de que comience el escrutinio provisorio. Pero, más allá de eso, fue importante el reconocimiento de Patricia al sistema electoral argentino.
“Desde mi punto de vista, lo que hay en Argentina es un sistema obsoleto de boletas – que se roban y llevan del cuarto oscuro - que hay que cambiar, ahora uno no puede decir que haya habido fraude. No hubo fraude y nadie presentó” una denuncia por ello, remarcó. Según detalló, las expresiones en redes sociales y a título individual “no hacen al sistema” electoral. “Acá eso (fraude) no sucedió”.
Declaraciones de semejante nivel no pasan desapercibidas frente a la entrega corta de boletas, las denuncias anticipadas de robo de boletas, o las quejas en redes sociales e, incluso, la insinuación, por parte de dirigentes libertarios, de que el resultado no podría ser lo suficientemente claro como para reconocerlo.
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