La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el diputado nacional Máximo Kirchner ponen al Congreso como centro de resonancia del debate político en el tramo final de la campaña de cara a las PASO. Con la gestión de gobierno e inauguración de obras anulada por ley electoral, Unión por la Patria encuentra un refugio en el parlamento.
El proyecto del diputado Kirchner sobre Aerolíneas Argentinas para intentar mostrar los dos modelos de país que se juegan en las elecciones es parte del debate que encendió la campaña. La privatización de las empresas estatales, el rol del Estado, su financiación, el fantasma menemista, algunos de los tópicos que prendió entre los candidatos.
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El legislador propuso una ley para que el Poder Ejecutivo no pueda disponer la venta de acciones de Aerolíneas Argentinas sin el aval del Congreso de la Nación. "En el contexto actual, donde los candidatos de Juntos por el Cambio (JxC) y La Libertad Avanza (LLA) hablan de privatizar empresas públicas, entre ellas Aerolíneas Argentinas, resulta prioritario garantizar su protección", explicó.
Para privatizar AA habría que votar en el Congreso y aprobarse con dos tercios de sus miembros. Esa es la columna vertebral del proyecto que propone introducir un párrafo quinto al artículo primero de la Ley 26.466 y así replicar el requisito establecido en el artículo 10 de la Ley 26.741 de la petrolera YPF, estatizada en 2012.
Inmediatamente hubo reacción de la oposición. La encabezó Horacio Rodríguez Larreta. Cruzó a Máximo y expuso la idea de Juntos por el Cambio sobre esta temática. "Los argentinos no tienen por qué subsidiarla. Tenés miles de aerolíneas en el mundo que se autofinancian, algunas hasta ganan plata", dijo el alcalde. Una máxima que puede ser replicada en las otras empresas, sobre todo en la mirada del macrismo con YPF. "Son 700 millones de dólares por año que la familia del Conurbano subsidia a través del IVA de la leche", lanzó Larreta sobre Aerolíneas Argentinas.
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El debate quedó expuesto ante la sociedad aunque aun no hay certezas de que pueda ser debatido en el Congreso. El proyecto fue firmado y presentado. Pero en el oficialismo ven poco probable que haya sesión en la cámara baja. "La vemos difícil que viajen todos desde sus provincias para venir antes de las PASO", dijo un diputado de UP ante El Destape.
Sí habrá sesión antes de las elecciones generales de octubre. También con un tema que divide aguas. Pese al rechazo del oficialismo, la oposición logró consenso entre 10 bloques para tratar el 23 de agosto la modificación de dos artículos de la ley de alquileres. Otra vez: dos modelos de país.
Negociación para el quórum en el Senado
Donde habrá sesión antes de las PASO, según le confirmaron fuentes parlamentarias a El Destape, es en el Senado de la Nación que preside Cristina Kirchner. Allí se destrabaron los conflictos que hubo la semana pasada en el oficialismo para una sesión clave de leyes sobre salud y justicia. Sergio Massa gestionó a contrarreloj con una de las sillas que no se ocuparon para el quórum necesario: la del senador Guillermo Snopek. El jujeño, junto a Edgardo Kueider, fue una de las dos piezas que faltaron para lograr el número en la cámara alta.
Hubo cortocircuitos en el peronismo que tuvieron consecuencias. La primera fue que el oficialismo en Jujuy dio de baja la lista de Snopek, quien encabezaba los diputados de UP en Jujuy. "Tenemos de cabeza de lista a un tipo que no nos da quórum", afirmaba a este portal enojada tras la sesión una senadora de buen vínculo con Cristina, en un claro mensaje hacia el jujeño. Pero en las horas posteriores todo cambió. Alberto Fernández tomó la decisión de intervenir el PJ jujeño conducido por Rubén Rivarola, tal cual lo reclamaba Snopek, por ser cómplice de la represión de Gerardo Morales y los cambios constitucionales en esa provincia.
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Y luego el precandidato a presidente de UP hizo lo suyo: repuso a Snopek como cabeza de lista otra vez y también volvió a subir a Carolina Moisés como líder de senadores de jujeños, que también la habían bajado de la nómina. Todo volvió a la normalidad. Con Snopek adentro y en sintonía, se está terminando de delinear los puntos finales con el entrerriano Kueider. Desde el bloque oficialista en el Senado adelantan que "sí o sí esta sesión se va a hacer y va a ser antes de las elecciones del 13 de agosto". Se especula con que sería la semana que viene.
El Frente de Todos necesita 37 senadores para el quórum. El factor Kueider tiene que ver con tratar su proyecto para bajar el costo de la tarifa eléctrica en las provincias del norte entre diciembre y marzo en la denominada "zonas cálidas". Entre ellas está Entre Ríos, el distrito que él representa. El entrerriano había hecho un acuerdo con el bloque oficialista: si se lograba dictamen de ese proyecto, Kueider bajaba al recinto. Pero por las dificultades que tiene el FdT en cada cámara del Congreso tras la derrota del 2021 en las elecciones no pudo ni consensuar con la oposición dictamen de este proyecto. Entonces el senador no dio quórum. Aunque ahora estaría en vías de resolución.
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La oposición no dará quórum, tal cual lo hizo la semana pasada. Aunque bajará a debatir, oponerse a los proyectos y votar en contra si el Frente de Todos consigue los números. Uno de los temas candentes es el pliego de decenas de jueces. En el temario se incluye también temas importantes de salud, como el Programa de Prevención, Diagnóstico y tratamiento Integral de la Pubertad Precoz y el proyecto por el que se establecen los procedimientos médico-asistenciales para la atención de mujeres y personas gestantes frente a la muerte perinatal.
La semana pasada, apenas se dio el fracaso de la sesión, Oscar Parrilli afirmó que los senadores de JxC no se presentaron en el recinto porque responden a órdenes del CEO del grupo Clarín, Héctor Magnetto, y del director del diario La Nación, Fernán Saguier. Al otro día, ambos diarios salieron con el tema en su título principal en tapa.