Un verano de bajísima densidad política. Así se podría calificar al receso en Entre Ríos, en la antesala de un año que puede ser bisagra en la vida institucional de la provincia, pero que sin embargo muestra una tranquilidad pasmosa. Una quietud llamativa siendo que, de desdoblarse comicios, en menos de 200 días se irá a votar en elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) nuevo gobernador, con una chance neta de que se cambie de color político por primera vez en dos décadas.
A diferencia de otros territorios donde ya se ve una rosca propia de la previa del armado de listas y de cierre de candidatos, en Entre Ríos los posibles postulantes han optado por no moverse de su zona de confort o, directamente, desaparecer de escena. Mientras por ejemplo en Santa Fe, a pocos kilómetros de la provincia, ya se van delineando candidaturas, hay fuego mediático y armado de coaliciones de forma casi constante, en suelo entrerriano pareciera estar casi todo definido. Reina una suerte de idea que las cartas están echadas, de que no hay mucho por hacer más que esperar una batalla entre los dos espacios que concitan, como a nivel nacional, el grueso de los votos. Lo que no termina de quedar claro, al menos en uno de ellos, es quiénes encabezarán finalmente las boletas.
PJ: Muchos nombres, poca claridad
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Nada parecer estar claro del lado del oficialismo. El gobernador Gustavo Bordet optó por tomarse un descanso los primeros 10 días del 2023 y retornó para mostrarse en modo campaña, aunque poco acompañado. Con el que más se lo ha visto es con Adán Bahl, intendente de Paraná y quien ya ha manifestado su interés de participar por la Gobernación. El mandatario y el jefe comunal han recorrido obras en la capital, como la puesta en valor del Centro Cultural “Juan L. Ortiz” o la pista de atletismo que se construye en el Parque Berduc, para entrenamiento de alto rendimiento.
El concordiense transita el inicio de su último año como titular del Poder Ejecutivo provincial, sin posibilidad de reelección. Es el dirigente del peronismo con mejor imagen y ya aseguró que no estará ajeno a la elección. Todo indica que el camino natural, como sus antecesores Sergio Urribarri y Jorge Busti, será el primer lugar en la lista de Diputados.
No fue sencillo, asimismo, el inicio de año para el gobernador. Quedó entrampado en la polémica por su firma en el documento que acompañaba el juicio político a la Corte Suprema. Finalmente se corroboró que su rúbrica no estuvo presente. Una decisión clara de despegarse del ámbito nacional, en la previa de un comicio que, aunque no se haya ratificado, todo indica será desdoblado.
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El Destape pudo confirmar que la decisión de no participar del documento enfrió la relación con la Casa Rosada. “Más del lado de Alberto que de éste”, aseguraron desde el círculo del gobernador, que de igual modo no se sintió solo en su cruzada, dado que otros pares tampoco se mostraron proclives a la firma del escrito. Oficialmente, en tanto, no se ha hablado del tema.
Lo único que resta definir del lado del gobernador es cuándo dará a conocer la decisión de separar las elecciones provinciales de las nacionales. Como ya explicó este medio, a fines de 2022 la Legislatura, con un tratamiento exprés, modificó las fechas previstas para ir a las urnas en Entre Ríos en caso de separarse de las nacionales. Se habla de un pacto implícito con el frigerismo, que acompañó en las cámaras. Bordet tiene hasta fines de abril para firmar el decreto.
Bahl, por otro lado, no ha cesado en su trabajo constante de mostrarse activo durante el verano. A un conjunto de actividades propias para la época, a través del programa Activá Verano, le ha sumado la exteriorización de proyectos con fondos propios –especialmente asfaltado en barrios- y obras financiadas con recursos nacionales. Si bien ha evitado hablar de su postulación en los últimos meses, su entorno le aseguró a El Destape que está en carrera, pero en silencio al respecto. Otros, apuestan a que su buena imagen colabore a sostener la capital.
Enrique Cresto se ha refugiado en sus funciones como intendente de Concordia. El extitular del Enohsa, cargo que dejó para volver a hacer territorio, ha preferido mostrarse activo en relación obras y la adquisición de maquinaria para el municipio que conduce. Sin chances de ir por otra Intendencia, el dirigente apuesta a ser otra vez la figura elegida para encabezar la propuesta pejotista en 2023. Viene de una mala experiencia, perdiendo por amplia diferencia en 2021. En alguna ocasión, el exfuncionario nacional dijo que la mejor chance del oficialismo era poner nombres fuertes en las PASO para la Gobernación en las principales ciudades –Concordia, Paraná, Gualeguaychú, Concepción del Uruguay- y luego apostar a la suma de esos votos en las Generales. El fin de semana corrió el Triatlón de La Paz junto a su hermana, la exdiputada nacional Mayda Cresto, y ha evitado el contacto con la prensa.
Los demás nombres del menú del peronismo entrerriano parecen correr de atrás: la vicegobernadora Laura Stratta; el intendente de Gualeguaychú, Martín Piaggio –el más K de los postulantes-; o el secretario de Agricultura de la Nación y exministro de Producción, Juan José Bahillo, no parecen tener la fuerza necesaria para ir por la Casa Gris. En las últimas horas se sumó el diputado nacional Marcelo Casaretto, que en contacto con Radio 10 de Buenos Aires dejó entrever su interés de competir. El legislador le ratificó a El Destape que su intención es participar, una vez rubricado el decreto que llame a elecciones.
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Frigerio optó por el descanso
Rogelio Frigerio abandonó su “modo campaña” durante este verano. A diferencia de inicios de 2022, cuando recorrió carnavales, fiestas populares y balnearios, el diputado nacional y candidato a gobernador por Juntos por Entre Ríos –denominación local de Juntos por el Cambio- decidió tomarse al menos cinco semanas de vacaciones. Desde su entorno le confiaron a El Destape que no estará en actividad hasta la segunda semana de febrero.
El exministro del Interior ha trasladado su descanso a las redes sociales. Su último posteo en Instagram es del 31 de diciembre y en Twitter, a cuentagotas, emite algún mensaje. Algunos leen su inmovilidad como un signo de confianza, propio de quien viene de ganar una elección con holgura y pica en punta para suceder a Bordet en la Casa Gris. “La oposición está vendiendo la piel del oso antes de cazarlo”, lanzó un legislador oficialista, asegurando que en las filas cambiemitas existe una excesiva confianza.
Del lado del radicalismo, por otro lado, tampoco se han registrado grandes movimientos. El centenario partido, es de esperarse, ponga el nombre que acompañe a Frigerio en la lista. Debe ser una mujer. Gracia Jaroslavsky, hija del histórico dirigente “Chacho” Jaroslavsky, es uno de los que suena. Gabriela Lena, actual diputada nacional, es otro.
El precandidato por Entre Ríos Cambia, Pedro Galimberti, también quiere ser parte de la discusión. El exintendente de Chajarí se despachó en las últimas horas con críticas al sistema santario provincial y dijo que Entre Ríos está “patas arriba”. Según supo este medio, la ideal del actual diputado nacional es apretar el acelerador a partir de febrero, recorriendo la provincia y armando nóminas alternativas a las que acompañen la propuesta frigerista. La apuesta es a la de fortalecer el radicalismo y devolverle el lugar de preponderancia que supo tener.
Hablar de terceras opciones en Entre Ríos es hoy hablar de prácticamente casi nada. El socialismo, finalmente, se encolumnó detrás de Rogelio Frigerio y Juntos por el Cambio. Pese a que una línea interna ya lo venía haciendo y el oficialismo partidario se mostraba reticente a meterse en la “grieta”, el partido fundado por Juan B. Justo optó por acompañar la propuesta del exministro. De hecho, en las últimas semanas, le entregaron un borrador de lo que consideran debe ser un proyecto de reforma electoral integral en la provincia. La izquierda, por su lado, se espera que compita en soledad.
La campaña en Entre Ríos no arranca. En la provincia donde la siesta es sagrada, parece haberse tomado un descanso más largo de lo habitual.