Rumbo a las generales de octubre en estas elecciones 2023, Patricia Bullrich avanza en el diseño de su estrategia para contener los votos que cosechó Juntos por el Cambio en las PASO en el marco de un escenario de tres tercios en el que a nadie le sobra nada. Este miércoles se reunirá con Horacio Rodríguez Larreta para tener una “foto de unidad”. En la provincia de Buenos Aires analizó los pasos a seguir junto a intendentes y su candidato a gobernador, Néstor Grindetti. El rol clave que tendrá Diego Santilli en ese territorio.
La ganadora de las PASO y ahora candidata a Presidenta se mostrará mañana en una cafetería de Palermo con el Jefe de Gobierno. Tras la derrota del domingo, Larreta solo expresó unas palabras sobre el escenario de Parque Norte y no realizó más declaraciones. Allí, destacó que la "responsabilidad" con la que la coalición opositora llevó adelante la interna y prometió que en JxC están "más juntos que nunca". Mañana miércoles reaparecerá en público en lo que se interpretará como una demostración de unidad y fortaleza de la coalición opositora.
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Larreta se recluyó en el seno de su familia ayer y mantuvo conversaciones con Gerardo Morales y Diego Santilli, quien fue derrotado en la interna bonaerense. Este martes, se reunió con equipos de trabajo para interiorizarse sobre el avance de la gestión en la Ciudad y mañana, antes de verse con Bullrich, encabezará el clásico encuentro de Gabinete porteño como todos los miércoles. La gestión continúa.
Y hablando de fotos, la primera de la semana fue junto a su jefe de campaña, Juan Pablo Arenaza; su candidato a vicepresidente, Luis Petri; y los diputados Cristian Ritondo y Hernán Lombardi. Con ellos empezó a analizar cuál será la mejor estrategia para contener los votos y crecer frente a los dos rivales con los que comparte las mayores chances de llegar a la Presidencia.
Son más de 2,6 millones de votos que necesita retener Bullrich de su rival para ingresar al ballotage de noviembre. Para ello, la provincia de Buenos Aires es clave y fue allí a donde se dirigió esta mañana para reunirse con la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez, y el dirigente de su espacio que ganó la interna en San Isidro, Ramón Lanús. El distrito elegido fue un gesto para quien se mantuvo neutral en la campaña. De hecho pudo estar presente en la boletas de ambos precandidatos. Los porcentajes que obtuvo Juntos por el Cambio en estos distritos están entre los cinco más altos de toda la Provincia. De cara a octubre, Martínez pretende ser la más votada de todos los intendentes.
Junto a ellos y Grindetti hicieron un balance de la campaña, expresaron satisfacción con el resultado y debatieron sobre cuál será la mejor estrategia de acá en más. Lo que se analiza hoy en día en el bullrichismo es si hay que virar al centro el discurso, pero no está definido aún. Lo que creen en el PRO es que cuanto más extremo se mantenga Milei, más fácil se le presenta a Bullrich porque aun siendo “dura” puede mostrar moderación. Un ejemplo de ello fueron sus declaraciones sobre la propuesta del libertario de volver a penalizar el aborto. "No voy a cometer el error de discutir el aborto en medio de la crisis", dijo Bullrich a Radio Mitre y advirtió que un plebiscito divide al país y lo corre de la discusión que, considera, es la más importante y tiene que ver con lo económico.
Una de las ideas que esbozó uno de los presentes es que hay que mantener la esencia del espacio y el tono de la campaña, con sus convenientes ajustes por ser una nueva instancia. “Hay que convencer más que parecer”, fue la frase que se escuchó.
La estrategia de Bullrich y Grindetti en la provincia de Buenos Aires
De lo que no se habló en ese café, ubicado en la zona oeste de Vicente López, es sobre Carolina Píparo. La versión de un posible acuerdo que circuló, guiño mediante con tono de chicana de la candidata libertaria mediante, fue desactivada en las últimas horas. Lo que sí valoró Grindetti es que Milei y Piparo impulsaron debates “positivos como el tamaño del Estado y los privilegios”.
Pero será la experiencia en la gestión uno de los puntos que utilizará Grindetti para desmarcarse de Píparo. Mostrará equipo y se recostará en los 58 intendentes que están al frente de municipios bonaerenses. El discurso girará en torno a demostrar que Juntos por el Cambio “es la única fuerza que tiene las condiciones y posibilidades” de liderar el cambio que, interpretan, quiere la población.
Grindetti centrará su campaña en propuestas contra la inseguridad, tema al que apelará a la experiencia de Santilli, la baja de impuestos, el achicamiento del Estado y la descentralización en los municipios de la ejecución de políticas en materia de seguridad, salud y educación.
Una de las conclusiones del domingo es que si bien Axel Kicillof fue el más votado, por encima de Massa y Grabois, en Juntos por el Cambio advierten que fue el peor porcentaje del peronismo/kirchnerismo desde la vuelta de la democracia en ese territorio. Creen que hay entre 5 y 6 puntos más que estarán en disputa en octubre ya que en las generales siempre sube el porcentaje de presentismo. Y creen que en ese universo hay mayor cantidad de votantes opositores que oficialistas.
Otra conclusión que arrojaron es que el 33 por ciento que alcanzó la fuerza fue similar al de María Eugenia Vidal en las PASO del 2019. “Ese número está consolidado”, aseguran al tiempo que admiten que igualmente será una “elección ajustada” la que se viene.
Según el recuento provisorio, Diego Santilli cosechó 1.297.127 votos y quedó a menos de 20 mil votos de diferencia de Grindetti. Desde el espacio de ambos aseguraron a El Destape que es buena la relación. “Trabajan bien juntos”, coinciden. Santilli ganó la interna en dos secciones: la primera y la séptima. Por su caudal de votos y porque lo consideran clave para retener los votos, formará parte de la campaña del intendente de Lanús y será él quien decida el rol y la intensidad de sus apariciones. “Le vamos a dar lugar en la estructura y él elegirá la dinámica”, anticiparon.