El reglamento por las PASO vuelve a generar tensiones dentro de Unión por la Patria

En el sector de Daniel Scioli volvieron a dejar trascender la idea de recurrir a la Junta Electoral -y luego a la Justicia- en caso de que no se respete la representación de las minorías. Los intendentes reclaman que se llegue a un acuerdo y que, en todo caso, le permitan competir en las dos listas. 

20 de junio, 2023 | 00.05

El reglamento de las PASO de Unión por la Patria en la provincia de Buenos Aires sigue tensionando la semana de cierre de listas, que ya de por sí suele ser picante. Luego de que todos los partidos integrantes de la coalición emitieran una declaración en respaldo al reglamento ideado por Máximo Kirchner, desde el sector de Daniel Scioli y Victoria Tolosa Paz volvieron a dejar trascender la posibilidad de acudir a la Justicia electoral si no se respeta lo supuestamente acordado respecto a la representación de las minorías. Así, de nuevo se endurecen los términos de una posible negociación final que -era el pensamiento mayoritario- debería darse sobre el cumplimiento de los plazos, que operan el sábado a última hora.

Los partidos que integran la nueva UP están alineados con Cristina Kirchner, a excepción de ParTE, la fuerza política de Alberto Fernández que le presta su estructura a Scioli. Durante el fin de semana emitieron comunicados idénticos en respaldo al reglamento electoral y acusando a los cuestionadores de "maniobras mediáticas con afirmaciones falsas que desconocen los acuerdos celebrados". Con eso buscaron dar por cerrado el capítulo de discusiones internas sobre la integración de las listas con representación por la minoría. Luego del acuerdo por la nómina de diputados, la controversia se trasladó a la integración de los concejos deliberantes en cada municipio.

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Sin embargo, desde el sector sciolista aseguraron que el acuerdo le había sido escondido y luego difundieron videos en los que mostraban la sede del PJ provincial cerrada, por lo que no tenían dónde ir a reclamar. De ahí de nuevo la advertencia de acudir a la Justicia en caso de que la junta electoral no modifique la representación minoritaria en las listas de concejales. "Tenemos esperanza de que todo se va a arreglar", decía uno de los armadores de la boleta del embajador. "Insistimos en que se abra la participación y la integración sea adecuada, no restrictiva", agregaba.

El acuerdo del kirchnerismo-massismo busca convencer a Scioli de bajar su candidatura mostrando que todas las fuerzas políticas, los gobernadores e intendentes están alineados en su sector, por lo que intentar competir con alguna posibilidad es una quimera. Es una estrategia de desgaste. Pero también es cierto que ni gobernadores, ni intendentes tienen ninguna gana de dividir la oferta electoral, por más desbalanceada que esté.

"La situación es muy complicada y no nos sobra nada, no podemos dispersarnos en una interna en nuestros territorios", explicaba un intendente. Aunque se muestren alineados, los jefes comunales quieren que se habilite la boleta en "y". Es decir, que les permitan ir tanto en la oferta del kircherismo-massismo que como en la de Scioli y Tolosa Paz. Los gobernadores, se comentaba, también pretenderían colgar sus candidatos a diputados de ambas boletas. La baja participación de las elecciones del domingo en Chaco y el resultado que complicó la reelección de Jorge Capitanich sirvieron para sumar preocupación en el peronismo del interior.

Scioli da todos los días señales de que su candidatura va en firme. "Es una decisión que tengo tomada, lo siento como una misión", insistió anoche en TN. En la búsqueda del voto antikirchnerista, el embajador recorre las señales opositoras incluso con alguna patinada, como la que tuvo cuando habló de una posible incoproración de Patricia Bullirich, algo que enojó mucho a Cristina Kirchner. Todos los que hablaron en los últimos días con él en privado, aseguraron que vieron a Scioli tan convencido como cuando habla en público. "Estoy jugado, siento que es mi última posibilidad", comentaba un intendente que le había expresado el "Pichichi".

La mirada que prevalecía era que debía darse una última instancia de negociación antes de la inscripción de candidaturas del sábado a la medianoche. Obviamente, ya nadie imagina que Cristina, Alberto y Massa puedan sentarse alrededor de una mesa, pero sí algunos de sus representantes. "Cristina se juntó con Florencio Randazzo antes de las elecciones de 2017, es lógico que también se haga un último intento ahora", imaginaba un funcionario de buen diálogo con ambos sectores.

Las chances de que esa última instancia llegue a buen puerto dependerá de la generosidad de la oferta de un lado y de la predisposición a aceptarla del otro, que tendrá que ver también con la percepción que se tenga acerca del papel que podrían hacer en las PASO. "Si uno tiene en cuenta lo que están diciendo uno y otro, no da la sensación de que vaya a pasar pero confiemos en que prevalezca el sentido común", agregaba el funcionario. 

Antes de que llegue ese momento, deberá conocerse la integración de la fórmula presidencial del kirchnerismo-massismo que servirá para acomodar el resto de las candidaturas. Según surge de la opinión de la dirigencia, quien hoy aparece con mayores posibilidades de encabezarla es Eduardo "Wado" de Pedro, pero las alternativas de Axel Kicillof y de Sergio Massa también tienen sus adeptos. La respuesta ya es cuestión de horas.