Nahuel Sotelo, diputado de la provincia de Buenos Aires que responde a Javier Milei, viajó a El Salvador para conocer de cerca la gestión del presidente Nayib Bukele. El legislador propone replicar el modelo de sistema carcelario de represión extrema sobre los reclusos y la quita de derechos.
Bukele se hizo popular en la región por su política de "Régimen de excepción", que permite a las Fuerzas Armadas detener a pandilleros sin proceso alguno. Además, fue noticia mundial por la inauguración de la "mega cárcel" para pandilleros que se viralizo en videos donde se ve a delincuentes esposados y durmiendo en camas de acero.
Sotelo, quien viajó junto a Santiago Santurio, presidente de Ciudadanos y candidato a diputado nacional por La Libertad Avanza, estuvo reunido con Salvador Chacón, Presidente de la Comisión de Obras Públicas, Vivienda y Transporte; Frank Menjivar, diputado del Parlamento Centroamericano; Carlos Marroquín, Director de Reconstrucción del Tejido Social; Silvio Aquino, emisario de Nayib Bukele y Consejero político Nacional del oficialista Partido Nuevas Ideas; y el viceministro de Salud, Carlos Alvarenga; y Carlos Hernández, Diputado en el PARLACEN y presidente de la comisión de relaciones exteriores.
"Estuvimos reunidos para interiorizarnos sobre la política llevada a cabo en seguridad, salud y reconstrucción social de la sociedad atacada por las pandillas. Visitamos los CUBOS, que son el Centro Urbano de Bienestar y Oportunidades. También visitamos el centro histórico de San Salvador, que fue recuperado por Nayib Bukele", señaló el legislador. Y agregó: "Lo que antes estaba bajo control de las maras hoy es un espacio para disfrute de los salvadoreños y el turismo, que cada vez es más creciente".
Para Sotelo, "El Salvador hoy es el país de la paz y un ejemplo de lucha contra las mafias". Y añadió: "Demasiado bien tienen a los presos allá. Lo digo después de haber escuchado historias de madres que habían visto como los mareros violaban a sus hijas frente a ellas, y les pedían un pago para no hacerlo más".
"También haber escuchado de boca de comerciantes, que eran extorsionados por las pandillas para pagarles por no saquear su negocio o asesinar a sus empleados. Allí te das cuenta que lo que ha logrado Bukele es para aplaudir de pie. Por algo tiene 93 por ciento de apoyo popular", afirmó el libertario.
Por último, remató: "Los medios hablan con la mirada puesta en los pandilleros pero no en los ciudadanos que durante tantos años sufrieron la violencia de las maras. El Salvador tiene políticas que podrían ser trasladables a nuestro país y trabajaremos para eso”.
Horror: un informe expuso cómo son las torturas en la mega cárcel de Bukele
La organización de derechos humanos Cristosal denunció que, tras más de un año de régimen de excepción en El Salvador, murieron más de 150 personas que estaban detenidas. En el informe, acusaron "torturas sistemáticas" en las cárceles por parte del gobierno de Nayib Bukele.
El régimen de excepción en El Salvador dispuesto por el presidente Bukele comenzó el 27 de marzo de 2022. "El informe sobre el primer año del régimen de excepción de Cristosal presenta la primera lista verificada de personas que murieron bajo la custodia del Estado y documenta prácticas de tortura sistemáticas al interior de los centros penales. También aborda la situación de las mujeres, niñas, niños adolescentes y población LGTBIQ+, así como las reformas judiciales que limitan o imposibilitan garantías judiciales básicas", manifestaron desde Cristosal.
"La organización documentó 139 muertes durante el primer año del régimen, es decir, entre el 27 de marzo de 2022 y el 27 de marzo de 2023. De estas, cuatro corresponden a mujeres y 135 a hombres", detallaron y agregaron: "Ninguna de las personas fallecidas había sido declarada culpable del delito que se les atribuyó al momento de la detención. Hasta abril de 2023, la cifra de muertes registradas por Cristosal era de 153".
En el documento, además, explicaron cómo fue el contexto de las muertes denunciadas. "Fueron el resultado de torturas y lesiones graves y sistemáticas infligidas a las personas detenidas. Fotografías y el propio IML (Instituto de Medicina) documentaron signos de asfixia, fracturas, numerosos hematomas, laceraciones e incluso perforaciones en los cadáveres. Casi la mitad de las personas fallecidas en centros penitenciarios fueron víctimas de muertes violentas confirmadas, posibles o sospechosas. Además, cerca de un quinto de estas muertes fueron causadas por patologías que evidencian una negligencia deliberada en la provisión de asistencia médica, medicamentos y alimentos, registrándose incluso muertes por desnutrición", sostuvieron.