A horas de la definición de los resultados de la segunda vuelta de las elecciones 2023, en el búnker de campaña del candidato a presidente Sergio Massa predomina la prudencia que implica un escenario reñido, pero con mucha confianza en lograr la victoria. Buenas sensaciones en la provincia de Buenos Aires e incluso en obtener buenas cifras en Córdoba. Se presume un mal andar en Mendoza. Voto a voto, la densidad poblacional de cada región decidirá el futuro.
Desde que se abrieron las puertas del Complejo Art Media C, situado en el barrio porteño de Chacarita, la mezcla de sensaciones se palpa en el aire. En las inmediaciones llegan las columnas de gremios como la UOCRA o UPCN, con tono de algarabía a la espera del candidato. Dentro, se destila confianza mezclada con cautela. Es que la contraposición de resultados en cada región todavía no permite dilucidar el resultado final
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
De momento, voceros del equipo de comunicación de UP hablan de una satisfactoria elección en la provincia de Buenos Aires, bastión del peronismo y la clave para destrabar un balotaje reñido en favor de Massa. A su vez, esperan superar el umbral del 30% en Córdoba, uno de los objetivos planteados luego de haber triunfado en las generales de octubre.
A contramano, Mendoza aparece como una potencial derrota, ya que Javier Milei se habría impuesto con comodidad. En Santa Fe también auguran una vitoria para el libertario, pero con menor margen. Qué región sopesará más sobre el resultado final, esa es la cuestión.
Normalidad en los comicios
Contrario al agite permanente que provocó La Libertad Avanza por la premoción de "fraude", las elecciones transcurrieron con normalidad. El 76% del padrón eligió sin mayores irregularidades. De hecho, las denuncias de mayor peso provinieron desde UP, debido a que aparecieron boletas truchas en las escuelas o dañadas arbitrariamente.
A lo largo de la jornada, desde ambos espacios se pudo contemplar un gran despliegue de fiscalización, lo cual reduce las posibilidades de denuncias. Por supuesto, La Libertad Avanza se vio asistido por el aparato del PRO que aportó Juntos por el Cambio. El combo para enfrentar al natural andamiaje que presenta el Partido Justicialista.
Ahora la moneda está en el aire. Unos 35 millones de argentinos habilitados para votar tuvieron la oportunidad de acudir a las urnas en todo el territorio nacional y en el extranjero para designar al Presidente que administrará la Argentina durante los próximos cuatro años.
El balotaje de hoy clausura un largo proceso electoral que se inició en febrero pasado con las primarias en La Pampa y continuó en todos los distritos del país -en la mayoría de ellos en forma desdoblada-, donde se renovaron autoridades ejecutivas y parlamentarias locales, además de los cargos nacionales.
Hoy será la segunda vez en la historia del país en que un mandatario resulte electo en segunda vuelta: sólo ocurrió en el 2015, cuando Mauricio Macri terminó imponiéndose sobre Daniel Scioli. El escrutinio, de carácter provisorio hasta que se dé a conocer el definitivo, está a cargo del Ministerio del Interior, y la tarea es llevada a cabo por la Dirección Nacional Electoral.
Ya se eligió al nuevo presidente y a las 21 se difundirán los primeros resultados. Mientras tanto, los minutos que corren alimentan la incertidumbre de un final cerrado.