En la búsqueda de ganar mayor protagonismo en la campaña de Juntos por el Cambio para las elecciones 2021, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, salió a confrontar con el Gobierno en sus iniciativas para reformar la Justicia y también, a través de su ministro de Salud, a politizar la distribución de las vacunas contra el coronavirus, algo que se viene realizando siguiendo criterios equitativos y consensuados.
"Los grupos de riesgo no son proporcionados a la población", intervino el ministro Fernán Quirós, a quien Rodríguez Larreta busca instalar como candidato en CABA para las elecciones de este año 2021. "Estos temas los debatimos en las reuniones semanales con todos los ministros de Salud. Ellos salen a plantear estas diferencias a través de los medios por marketing y para levantarle el perfil a Quirós", replicaban desde el Gobierno. De paso, comentaban que ya más de diez provincias comenzaron a vacunar a sus docentes, algo que en la Ciudad todavía parece lejos.
Juntos por el Cambio está cruzado por las internas. Rodríguez Larreta trata de mantener un rol central que lo posicione como candidato natural en 2023, pero la línea política se la vienen marcando Mauricio Macri y Patricia Bullrich, de confrontación total con el Gobierno. Ayer salió con un hilo de tuits apurándose a criticar la iniciativa de la comisión bicameral para investigar el funcionamiento del Poder Judicial. "Si permitimos que se busque condicionar a la Justicia, primero nos quedaremos sin república; y, luego, sin democracia", sostuvo en el último de los mensajes de un contenido "institucionalista", pero que nada aclara sobre las muchas pruebas que ya se conocen sobre la existencia de una mesa judicial en el gobierno de Macri dedicada a perseguir opositores. Que Rodríguez Larreta salga rápido a expresar su posición en un tema de discusión de la agenda nacional es una novedad.
Más llamativo aún resultó la aparición mañanera del habitualmente moderado Quirós, con críticas a la distribución de vacunas. “Nación tomó la decisión de una distribución de vacunas basada en población general cuando la vacuna se aplica a grupos de riesgo, y los grupos de riesgo no son proporcionados a la población general en todas las jurisdicciones”, sostuvo el ministro porteño. También dijo que la Ciudad tenía más trabajadores de la salud. Las referencias cayeron muy mal en Gobierno, que justamente muestra como uno de sus valores el reparto equitativo que viene haciendo de las dosis pese a los retrasos de los laboratorios. "El criterio de equidad y federalismo del Ministerio de Salud es hacerlo sobre la base poblacional. Así como a ningún argentino le faltó un respirador, tampoco le van a faltar vacunas", respondían en la Casa Rosada.
El Gobierno sostenían que era la manera de hacer el cálculo de manera más equitativa y estable porque hay lugares en los que hay población que vive en un lado y trabaja en otro, lo que vuelve fluctuante el criterio. "Por eso nuestra propuesta es tener una base objetiva de distribución que es Indec y ajustar en función de situaciones específicas, como se hace siempre en todas las campañas y en el calendario", añadieron. Y aclaraban que de todas estas cosas se hablan de manera específica en las reuniones que los ministros de Salud hacen todas las semanas para discutir sobre todo lo que tenga que ver con la pandemia. Que Quirós haya expresado sus quejas al Gobierno en una conferencia de prensa en vez de hacerlo ante sus colegas en un ámbito cerrado, les dejaba muy en claro que la intención era politizar el reparto de vacunas.
Incluso, algunos se preguntaban por qué un distrito con las posibilidades económicas de CABA no había explorado la adquisición de vacunas por su cuenta. "Claro que hubieran podido", respondían en Salud. "Pero ellos no hicieron un sólo aporte desde que empezó la pandemia. Ni ayuda económica a los trabajadores, ni subsidios a las empresas ni a los comercios. Tampoco construyeron puestos sanitarios. No hicieron absolutamente nada así que menos van a salir a buscar vacunas", despotricaban contra la actitud de la Ciudad. Por la tarde, circuló un whatsapp que aseguraba que el gobierno porteño que se suspendía la vacunación de adultos mayores hasta nuevo aviso. "No es cierto. Se están terminando los 40 mil turnos ya dados a adultos mayores y empezamos a llamar a los próximos 21 mil empadronados a la espera que lleguen las próximas dosis de Sputnik V que nos tiene que entregar Nación", respondían en Ciudad.
En Gobierno veían la intención de forzar una discusión ficticia para instalar a Quirós como referente. El macrismo suele utilizar como estrategia ubicarse en el rol de víctima ante una supuesta agresión. Rodríguez Larreta ya lo hizo cuando anunció que acudiría a la Corte Suprema por el recorte en el envío de recursos nacionales para la policía de la Ciudad. Lo mismo ahora su ministro de salud con las vacunas, cuando se trataba de un criterio consensuado y nunca criticado. El jefe de gobierno quiere colocar a Quirós como primer candidato a diputado, el mismo lugar que pretende Patricia Bullrich. Nada menos. El affaire de las bolsas mortuorias de la marcha del fin de semana le dejó en claro al jefe de gobierno el peligro que le representaría a su pose de moderado que la ex ministra de Seguridad se haga cargo de la campaña porteña.