Denuncian una "degradación planificada" del servicio de trenes de Santa Fe

Volvieron a suspender el servicio del tren Rosario-Cañada por falta de locomotoras. Milei busca el regreso de los 90, donde el retiro del Estado en el control de empresas públicas derivó en una crisis de funcionamiento y deudas.

01 de julio, 2024 | 11.13

La Ley Bases alcanzó la aprobación definitiva en el Congreso la semana pasada y el presidente Javier Milei obtuvo vía libre para establecer el desguace del Estado. En ese sentido, el Gobierno impulsa la desinversión en el área del Transporte y la privatización de la empresa pública Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) está más cerca que nunca. 

Los servicios de transporte continúan con su funcionamiento de manera irregular. Luego de estar con la boletería cerrada durante todo febrero,
los usuarios del tren que conecta Rosario y Cañada de Gómez denuncian la reiterada cancelación de servicios por falta de locomotoras, que muchas veces deben ser utilizadas en los servicios de larga distancia a Córdoba o Tucumán.

Además, la tarifa pasó de $440 a $800 y las dificultades para la compra de pasajes online son cada vez más recurrentes. La preocupación se acrecienta tras la luz verde que tuvo el mega proyecto libertario en el Parlamento gracias a los votos facilitados por el gobernador Maximiliano Pullaro para otorgarle al Presidente "herramientas fundamentales".

De esta manera, el Gobierno nacional contempla la privatización de SOFSE, que se encarga del servicio de transporte de pasajeros, así como también de Trenes Argentinos Cargas (TAC).

La decisión del Congreso encendió las alarmas de los santafesinos. El funcionamiento del tren que comunica a Rosario con las localidades de Funes, Roldán, San Jerónimo Sud, Carcarañá, Correa y Cañada de Gómez se reactivó en agosto de 2022 y, desde su puesta en funcionamiento, se volvió imprescindible como medio de conexión: en lo que va del 2024, el servicio ya sumó 42.585 pasajeros, lo que representa un promedio de más de 8 mil personas por mes.

Sin embargo, desde diciembre se ve afectado por las políticas de desinversión tanto de Nación como de Provincia. En los últimos meses, el problema que se repite es la suspensión de servicios por faltas de locomotoras, o la salida de formaciones reducidas. El jueves y viernes de la semana pasada la formación de tren no funcionó debido a un déficit de equipos que tiene el Ferrocarril Mitre.

Ante esto, el diputado nacional Eduardo Toniolli volvió a manifestar su preocupación por el futuro del servicio. "El objetivo es deslegitimarlo que después nadie reclame cuando se cierre o se privatice, según sea el caso", afirmó en diálogo con Rosario/12

La situación viene generando inconvenientes entre los usuarios, que se enteran de la cancelación del servicio ese mismo día. Sobre todo, entre los jóvenes que abordan el tren para venir a estudiar a Rosario, o entre los estudiantes de la región que cursan en las sedes universitarias, las tecnicaturas y los profesorados que se cursan en Cañada de Gómez.

Por su parte, Stella Clerici, concejala de Cañada de Gómez, hizo referencia al pobre funcionamiento del servicio: “Viene pasando que las máquinas se rompen, que no hay repuestos, o que hay que esperar que llegue una locomotora desde Rosario", sostuvo.

"Es irregular, una semana funciona bien, pero diez días atrás tuvimos varios servicios cancelados porque no hay tracción. Y es algo preocupante”, explicó en declaraciones para el mismo medio.

Milei impulsa la degradación planificada del Transporte 

El problema abarca también los servicios de larga distancia que realizan viajes a Buenos Aires, Córdoba y Tucumán. De hecho, varias de las suspensiones que se dieron en el tren Rosario-Cañada de Gómez responden a que las máquinas estaban afectadas a algunos de estos servicios.

En mayo, se conoció la noticia de la suspensión del expreso Retiro-Rosario, que funcionaba desde diciembre de 2022 y corría únicamente los fines de semana. Y también la quita de dos de los tres coches Pullman que llevaba el tren diario entre Rosario y Buenos Aires. Eso se traduce en una pérdida semanal de 1.456 asientos, que ya no estarán disponibles.

Para el diputado Toniolli, la irregularidad en la prestación genera que la gente comience a discontinuar su uso porque se deja de confiar en el servicio. “Es parte de lo que nosotros venimos denunciando que viene pasando con distintos servicios de corta, pero también de larga distancia a nivel nacional. Hay una degradación planificada de los servicios de trenes de pasajeros”, sostuvo en diálogo con Rosario/12. 

A principios de marzo, Toniolli realizó un pedido de informes ante el corte del servicio Rosario-Cañada de Gómez, donde manifestó su preocupación sobre la situación del servicio, al que juzgó como cada vez más necesario ante la crisis del transporte público interurbano

La consulta nunca fue respondida y el diputado denunció que se trata de una modalidad común de la comisión de Transporte del Congreso: “Uno intuye que tiene que ver con que la alianza entre el PRO y La Libertad Avanza, que no tienen ningún interés de que haya funcionamiento de esa comisión, porque sabe que uno de los temas que va a surgir con fuerza es este y el otro es el de los subsidios al transporte del interior”.

Un servicio errático para llegar a los 90

"El servicio (del tren de cercanía) es errático", advirtió Mariano Antenore, miembro de la Asociación Amigos del Riel. Según explicó, la falta de servicio del jueves y viernes se generó en el déficit de locomotoras.

"Muchas de ellas están paradas por fallas, y faltan repuestos para repararlas. Sumado a ello, han despedido a personal de Trenes Argentinos, y por eso falta también mano de obra en los talleres", indicó.

Asimismo, aseguró que "no es la primera vez que pasa que le quitan su máquina para ponerla en un tren de larga distancia (siempre el hilo se corta por lo más delgado)". Y recordó que el viernes por la tarde apareció una precaria solución al problema: se recibió otra máquina, "pero a media tarde fallaron sus luces, por lo que el tren volvió a quedar parado", detalló. 

A pesar de las dos suspensiones del servicio por problemas mecánicos en la locomotora, el tren sigue transportando a una gran cantidad de pasajeros. No obstante, Milei busca el regreso de la era de los 90, donde el retiro del Estado en el control de empresas que brindan servicios públicos derivó en una crisis de funcionamiento y deudas que debieron ser asumidas por el sector público.