En medio del paro nacional de transporte que afecta este miércoles a trenes, subtes, aviones, camiones y de las protestas de universitarios y organizaciones sociales, el periodista Roberto Navarro fulminó al gobierno de Javier Milei por querer "romper la historia", poner a "trabajadores contra trabajadores", intentar que la sociedad "acepte su pobre situación" y que se "libere la calle para los ricos". En este contexto, el fundador de El Destape le pidió tanto a la población como a los dirigentes sindicales que "no se resignen" y que "hay que volver a pelear en la calle" hasta que "les devuelvan todo lo que les sacaron" desde la llegada al poder del mandatario libertario.
"Les estamos diciendo que hagan un paro por tiempo indeterminado hasta que les devuelvan todo lo que le sacaron desde que llegó Milei. Paren el país, paren todo", dijo Navarro en El Destape 1070, y agregó "no se resignen, les robaron un montón, les sacaron salario directo e indirecto".
El periodista consideró que el Gobierno nacional, pese a que hay "un millón de pibes que se van a dormir sin comer", que "no entrega alimentos ni medicamentos" y que decida "aumentar tarifas y baja jubilaciones", pretende que la ciudadanía "no proteste ni se queje". "Está prohibido reclamar, el que reclama es un tipo jodido que nos embroma a todos.Tratan de poner trabajadores contra trabajadores. Vos no podés ir a trabajar porque el otro trabajador no te lo permite", indicó.
Para Navarro, el Gobierno quiere "romper la historia, que la gente empiece de nuevo y convencerlos de que acepten" que la crisis económica no tiene paliativos. "De que acepten su pobre situación, que se resignen, que se vayan a la casa, que liberen la calle para los ricos", resaltó, y lo encuadró como parte de "un fuerte laburo cultural" que impulsa el oficialismo. En esa línea, cuestionó: "¿Cómo creen que se ganaron las 8 horas? o el aguinaldo o las vacaciones o el derecho a votar? Todo se ganó peleando en la calle. Hay que volver a pelear en la calle con todo".
También recordó la historia de su abuelo paterno, que llegó al país desde España en 1912 y que trabajó "en un horno de ladrillo" donde "le pagaban monedas". En aquel tiempo, pese a que no había derecho a huelga, realizó varias protestas porque "no tenía guita para llevar a su casa " y fue preso en distintas ocasiones. Sin embargo, 25 años después, su hijo -el padre de Navarro- no sólo tuvo mayores derechos sino que llegó a ser dirigente gremial. "Si luchas por vos, luchas por el futuro. Que nunca te convenzan que no tenés derecho. Salí, protesta, reclamá, que te pasen en la tele a la noche, pero te van a tener que dar lo que merecés", destacó.