El Gobierno anunciará este miércoles una serie de medidas que apunta a la economía popular y atiende demandas históricas de las organizaciones sociales. Lanzarán un “blanqueo” en forma de monotributo social y gratuito por dos años para las más de tres millones de personas inscritas en el Registro Nacional de la Economía Popular (Renatep), además de crédito no bancario para el sector, y un Compre Estatal para fortalecer los circuitos de comercialización y ganar escala productiva.
El presidente Alberto Fernández hará el anuncio junto a los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, y participará la mesa directiva de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), que encabeza Esteban “Gringo" Castro.
El secretario de Economía Social del Ministerio de Desarrollo Social, Emilio Pérsico, anticipó la idea general de las medidas, y las calificó como "una de las más importantes" reivindicaciones de los movimientos populares. "Hay que hacer un proceso de blanqueo. Hay 4 millones de compañeros que se han inventado el trabajo y quieren estar en blanco, el problema es que los costos son muy caros", explicó el dirigente del Movimiento Evita en declaraciones radiales.
Pérsico también adelantó que la intención oficial es alcanzar "un monotributo social completamente gratuito para el compañero y el Estado", al menos por dos años. "Hay que darles ayuda y crédito”, agregó el funcionario. Los detalles del anuncio terminaron de delinearse este martes por la tarde, luego de varios meses de un trabajo que comenzó durante la gestión de Daniel Arroyo y continuó con la llegada de Zabaleta al ministerio.
El "el blanqueo" de la economía popular y, de la mano con ese reconocimiento, el acceso al crédito no bancario tendría un alcance mayor y de transformación real para millones de personas y sus capacidades productivas, más efectivo que el de “convertir planes sociales en trabajo genuino”, un enunciado que repite el presidente y que generó malestar en dirigentes sociales cercanos al gobierno.
De esta manera, el gobierno nacional encadena una serie de anuncios destinados a los sectores más castigados por la crisis, tras la publicación este martes en el Boletín Oficial del decreto presidencial que apunta a "transformar planes" e "incentivar la contratación" de sus beneficiarios en el sector privado. Según informaron a El Destape desde la UTEP, se trata de una iniciativa que ya impulsaron gestiones anteriores del Ministerio de Trabajo y que “sirve sobre todo para el sector de compañeros que pueden recuperar empleabilidad en el sector tradicional del mercado, pero no genera cambios estructurales y puede trabajar sobre un universo muy pequeño”.
Desde el sindicato de la economía popular indicaron que de esta manera el gobierno demuestra la predisposición para abordar con distintas herramientas “los problemas de la desigualdad”.
De las 2.830.520 de personas que se registraron en el Renatep -hasta agosto de este año-, el 57,3% son mujeres, y el 64,3% se ubica entre los 18 y los 35 años de edad. La mitad vive en la región centro del país y Buenos Aires es la provincia que encabeza la cantidad de inscripciones con el 35,6%.
Para tener una dimensión comparativa con la población que se generó su propio ingreso por fuera del mercado tradicional, los casi tres millones de inscriptos representan cerca de la mitad de la población asalariada del sector privado registrado, que llega a 6.493.760 según datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA).
Uno de los programas vinculados a la economía popular que el gobierno busca “reconvertir” es el Potenciar Trabajo, que tiene 1.100.000 beneficiarios, apenas un tercio de los registrados en el sector. La predominancia de mujeres y jóvenes en la informalidad es consecuencia, entre otros factores, de su exclusión o falta de oportunidades en el mercado laboral formal.
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