Mitos y verdades de la fusión LLA - PRO que vendió Milei

El Presidente vislumbró un acercamiento entre las fuerzas, mientras que el líder del partido amarillo, Mauricio Macri, amplía las distancias. El factor Patricia Bullrich, el escenario Congreso y el territorio.

02 de julio, 2024 | 20.45

"Vamos en camino a una fusión de fuerzas", anunció el presidente Javier Milei, cuando se le consultó sobre la relación de La Libertad Avanza (LLA) con el PRO. Curiosamente, casi 24 horas después, la fundación Pensar del partido que lidera Mauricio Macri espetó una lapidaria crítica a los primeros seis meses de gobierno de la motosierra: "Más interrogantes que certezas" 

Representantes de las dos fuerzas se miran extrañados ante la fusión que vendió el presidente de la motosierra. En el medio, el partido de Macri enfrenta su discusión interna con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que lidera el sector del PRO que más cerca se ubica de la fuerza oficialista.

La demorada sanción de la desguazada ley Bases significó el fin de una forma de colaboración entre LLA y los bloques rotulados como "dialoguistas", entre los cuales se encuentra el PRO. "Hasta acá llegamos: a partir de acá, es ley por ley artículo por artículo", comentaban voces amarillas en el pasillo de Diputados en la tarde del jueves.

Macri, revalidado como líder del PRO, hizo evidente su distanciamiento del actual presidente apenas sancionada la ley Bases. Esta semana, el sello fundado por el ex mandatario puede enfrentarse a la salida formal de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, del partido, así como las de los dirigentes que lidera, muchos de ellos con asiento en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.

Hay grandes chances de que lo que Milei vende como fusión del oficialismo con el partido amarillo solo abarque la fracción bullrichista del PRO. La ministra ya dio su prueba de amor al proyecto de la motosierra. Bullrich dio la órden de que sus diputados y senadores en la legislatura bonaerense armen bloques apartes con la denominación PRO Libertad.

De todos modos, una fuente del bullrichismo comentó a El Destape que "partidariamente no hay nada sobre una fusión". La tropa de la ex candidata a presidenta interpreta que hacia adelante "no hay otro camino que trabajar de manera conjunta". 

Una voz bullrichista recordó que tienen la palabra de Macri de que el jueves la ministra conducirá la asamblea del partido amarillo y espera que se cumpla. "Nosotros somos PRO y nos votaron por el PRO" aclaró. Ante este escenario partidario en ebullición y el antecedente de los bloques híbridos en la Legislatura bonaerense, fuentes que responden a Bullrich se debaten sobre una eventual ruptura del bloque de diputados nacionales: unos la descartan de plano, otros la ven como "una posibilidad".

A saber: de los 37 diputados que tiene el bloque del PRO en la Cámara baja, solo cinco responden a la conducción de Bullrich: Damián Arabia, Silvana Giudice, Laura Rodríguez Machado, Patricia Vázquez y Gerardo Milman. El primero de los mencionados fue el que redactó el proyecto para endurecer las penas contra el maltrato animal, denominada "ley Conan", nombre del perro muerto de Milei.

Distinta es la situación en el Senado. Desde las filas de LLA afirman no haber recibido comentarios sobre la mentada alianza. Por el lado del PRO, aclaran que ninguno de los integrantes de la bancada tiene a Bullrich como conductora. "No hay riesgo de ruptura y la fusión está totalmente descartada", sentenciaron fuentes de la Cámara alta que conocen la interna del bloque amarillo.

"No hay nada", aclaran fuentes al tanto del armado mileista en territorio bonaerense. A instancias de la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, el oficialismo trabaja en la construcción de un partido en distintas provincias para armar uno nacional y tenerlo a punto para el 2025 electoral.

La construcción nacional abarca el principal feudo de Macri, la Ciudad de Buenos Aires. Como ya se hizo explícito, desde la Casa Rosada anhelan de que Bullrich encabece una boleta a senadora el año que viene por la capital del país.

Por lo pronto, voces del oficialismo que transitan la provincia de Buenos Aires, ven como un hecho a futuro la llegada a sus orillas del PRO (Macri incluído), principal damnificado electoral de la aparición y llegada al gobierno de LLA. "Ellos no tienen otra salida", comentaron voces mileistas. Una segunda voz bullrichista concluyó que lo que se avecina es "una confluencia electoral"