24 M: libertarios y ala dura del PRO compiten por la impronta negacionista

Con discursos que reivindican la teoría de los dos demonios, corrieron al macrismo por derecha aunque el bando halcón tuvo más coincidencias con los liberales que con los moderados al hablar de "historia parcial". El PRO enfrenta una batalla por la línea discursiva mientras la UCR y la CC rechazan una confluencia con libertarios.

25 de marzo, 2022 | 00.05

Los libertarios no ahorran en esfuerzos para marcarle la cancha por derecha al PRO. El 24 de marzo, la resurrección de la teoría de los dos demonios y la pelea por las retenciones fueron exponentes de la última semana. Sin nada que perder, el sector que ganó protagonismo en la zona de la Ciudad y provincia de Buenos Aires se jugó con expresiones que intentaron dejar, en algunos casos, al macrismo como "moderado" y, en otros, mostraron coincidencias. El partido comandado por Patricia Bullrich atraviesa una disputa discursiva y, por lo tanto, también política. Una parte de Cambiemos prefiere y empuja a Horacio Rodríguez Larreta para que rompa con el bando halcón y comande la línea comunicacional del espacio porque la ex ministra de Seguridad no representa a todos. De hecho, cierra el universo de posibilidades. Esa batalla por la prosa podría no concretarse jamás y la indefinición explicó la multiplicidad de posturas en temas tan centrales como el Día de la Memoria. Mientras parte del comando de la extrema derecha reivindicó la idea de contar "la historia completa" de la dictadura cívico militar, el radicalismo, la Coalición Cívica y el PRO dialoguista pidieron por un "Nunca Más" pero el grupo más combativo se plegó a las posturas de quienes podrían ser sus socios políticos el año que viene. Resistencias.

En la Legislatura bonaerense, el diputado provincial Nahuel Sotelo, de Avanza Libertad, presentó un proyecto para que el 24 de marzo también sean recordados los miembros de las Fuerzas Armadas que fueron “asesinados por grupos violentos durante las décadas de los años 1960, 70 y 80” porque “en este país se le ha reconocido y hecho homenaje durante años a los guerrilleros, personas que se armaron para tomar el poder y atacar a las instituciones pero nunca se habló de aquellos uniformados que dieron su vida, acatando las órdenes, incluso, de gobiernos democráticos". En sus redes sociales, para reforzar, exigió "recordar la historia completa y no una memoria parcializada con ideología". Tanto desde el bloque PRO como desde el de la UCR en el palacio legislativo de Buenos Aires, no respondieron a la consulta de este medio sobre la postura de un sector que algunos aliados de Juntos por el Cambio quieren atraer.

Es que el discurso cambiemita no terminó de quedar del todo claro. Expresiones liberales de este estilo, además de volver a poner sobre la mesa un debate que debería estar saldado, de cuestionar el número de detenidos desaparecidos, le marcaron el juego a la principal alianza opositora. La frase del "curro de los derechos humanos" acuñada por Mauricio Macri, el intento de avanzar con el 2x1 a genocidas o el homenaje a "trece víctimas (soldados) que fallecieron el 5 de octubre de 1975 tras sufrir el ataque de un grupo guerrillero mientras cumplían funciones en el Regimiento de Infantería 29 de Monte, ubicado en Formosa" podrían ser solo la antesala de algo más profundo. 

Ni Cambiemos, ni el PRO en solitario, ni los liberales son grupos marginales de la política nacional. Los primeros cosecharon el 40% de los votos en las últimas dos elecciones y los segundos, como un fenómeno de la CABA y la PBA, están en torno al 18%. Con un ojo puesto en estos emergentes, no fueron pocos los sectores de Juntos por el Cambio que comenzaron a plantear la necesidad de una integración. El argumento fue sencillo: con experiencia, nombres y estructura, Juntos es la única opción que tienen los Milei y Espert para llevar sus ideas a la Casa Rosada. Sin embargo, hay resistencias. Ni la UCR ni la Coalición Cívica mostraron intenciones de sumarlos al armado y no fueron pocas las veces en que rechazaron una premisa de este estilo.

Dentro del PRO tampoco está clara la situación. Hay quienes no comulgan con el extremo liberal, al menos no para integrarlos pero sí como variable de liberación - "dicen lo que nosotros no podemos decir" -, pero también hay quienes muestran coincidencias. Patricia Bullrich publicó una nota en La Nación donde planteó que "como sociedad estamos construyendo y legando a nuestros jóvenes una memoria y una historia parcial, en donde quienes tomaron armas contra la democracia construyeron un relato épico, se apropiaron de los derechos humanos y buscan ser reconocidos como héroes de nuestra historia". Su mano derecha, el diputado Gerardo Milman, fue en la misma línea con un mensaje en redes sociales: "Homenaje a todos los muertos incluso a los que precedieron esta fecha. Un grupo minoritario se adueño de los DDHH que son de todos, requiere de la resignificación del concepto y recuperarlo".

O sea, no todo está unificado dentro de la alianza opositora. Mientras sí se vieron mensajes por la memoria, la verdad, la Justicia y el "Nunca más" en cuentas como las de Larreta, Martín Lousteau, Juan Manuel López, Maximiliano Ferraro, Elisa Carrió y Gerardo Morales, los halcones compartieron la mirada libertaria. "Hoy es el día de la memoria para pocos. El día donde en nombre de los DDHH te los quitan, te discriminan y te dicen q si fuiste víctima del terrorismo simplemente no existís. En recuerdo de las verdaderas víctimas, Justicia, Verdad y Reparación", publicó Victoria Villarruel, compañera de bancada de Javier Milei.

Otro ejemplo de la marcada de cancha liberal también se dio esta semana. Mientras ellos plantearon retenciones cero para el campo, Cambiemos se opuso a la suba actual para mitigar el impacto de la crisis desatada por la guerra en Ucrania. Un dirigente opositor no cambiemita analizó, sobre estas jugadas, la "gratuidad" de las declaraciones libertarias. No tienen nada que perder, logran discursos para la tribuna y hasta ganan protagonismo. Ante la amenaza, la incorporación, la síntesis de ambos bandos dentro de un mismo espacio es un reclamo que no se escucha fuerte, tal vez los rechazos resuenen más, pero tampoco es novedoso ni marginal. 

Para mostrar el camino, una frase que publicó José Luis Espert en sus redes sociales ante una nota periodística en la que se destacó que "Mauricio Macri ya mira 2023 y lanza propuestas: reforma laboral, baja de impuestos y privatizaciones". El libertario respondió "que buen laburo estamos haciendo los liberales! Cambiando el discurso de la corpo que nos ha destruido. Como dije en los debates presidenciales de 2019 "El futuro es liberal y ya comenzó".