El diputado nacional Leopoldo Moreau (Frente de Todos) consideró que lo más valioso en el fallo de que determinó la quiebra de la empresa Correo Argentino S.A., del Grupo Macri, "es que en la Argentina es posible que los poderosos no tengan impunidad".
Moreau dijo esta tarde al canal C5N que el fallo de justicia comercial que decretó hoy la quiebra del Correo Argentino SA, "fortalecerá la fe de la gente en la democracia y en la justicia" porque sentencia que "todo tiene un límite".
El diputado recordó que la concesión "el grupo Macri la obtuvo en 1997, durante el gobierno de Carlos Menem, y la contraparte de la concesión era el pago de un canon semestral, que lo hizo una sola vez hasta 2003".
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"El Gobierno de (el por entonces mandatario Fernando) de la Rúa le reclamó el pago de la deuda", señaló Moreau, por lo que consideró "falaz lo que hace Macri, tratando de vincular esto al kirchnerismo, cuando en 2001 se inició el trámite concursal y Néstor Kirchner ni soñaba con ser Presidente de la Nación". En ese sentido, completó: "Cualquier quiebra de una empresa argentina me entristece, pero que se quiera llevar una empresa con plata ajena, los estafados serían cada uno de los argentinos", al usarla "en su propio beneficio".
El legislador aseguró que "acá quieren hacer pasar a Macri como un empresario que invirtió en favor de la Argentina, y lo único que obtuvo fueron dividendos que fugaba afuera, y por eso está involucrado en la causa Panamá Paper".
Moreau expresó que el Grupo Macri hacía "negocio con plata de los argentinos, con exenciones impositivas, con no pagar canon y con sobreprecios en la obra pública", y refirió que "ya la Corte (Suprema de Justicia de la Nación) de la mayoría automática menemista lo salvó a Mauricio Macri, en un proceso por contrabando de la firma Sevel, y seguramente está aspirando a lo mismo, que llegue a la Corte en algún momento".
La jueza en lo Comercial Marta Cirulli decretó hoy la quiebra del Correo Argentino SA., tras dar por fracasado el proceso de salvataje, al entender que la oferta realizada por la compañía postal "solo representaba el 100% de la deuda a los ojos de la propia empresa", pero "no abarcaba el valor actual de la misma".
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