El Gobierno de Alberto Fernández muestra sus pergaminos internacionales que se le dieron y darán en 60 días. Y cree que la debilidad de la Cumbre de las Américas puede fortalecer a Argentina. Un integrante de la comitiva repite: “Gira por Europa con los primeros ministros, Cumbre de las Américas, primera vez que un presidente argentino es invitado al G7, después una bilateral en Washington con Joe Biden, se viene BRICS y después Mercosur en Brasil”.
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Otro integrante de la comitiva, de máxima confianza del Presidente, analiza la Cumbre en Los Ángeles: “La debilidad de esta Cumbre es la fortaleza de Argentina. Tenés a un Presidente de la Celac. A un Bolsonaro débil, a un Castillo débil, a un Boric reciente. Hay un vacío con Xiomara y AMLO que no vienen y el ‘cuquito’ Lacalle Pou que se ausentó por COVID. Todo esto le da una gran posibilidad a Argentina”.
Alberto estuvo casi toda la noche de su vuelo junto al canciller Santiago Cafiero terminando de delinear su discurso en la Cumbre. Habrá lugar a los bloqueos de Cuba y Venezuela. “Nicaragua es otra película”, confirman desde el gobierno sobre la línea a seguir sobre ese país que no fue invitado por Estados Unidos a la Cumbre.
Con foco en el trigo, en la energía y en la guerra, Argentina lleva con Fernández esos tópicos a California.
Además, habrá novedades como un anuncio clave sobre el gas que se hará con el presidente chileno Gabriel Boric. Y una reunión a último momento con el titular de la ONU, Antonio Guterres. Malvinas, paz mundial y alimentos, los vectores de la reunión bilateral en el hotel donde se hospeda Fernández en Los Ángeles.
También desfilarán Microsoft, General Motors y el presidente peruano, Pedro Castillo. A ellos verá el mandatario argentino. A partir de las 19 (hora argentina) del miércoles, estará en la apertura de la IX Cumbre de las Américas. Será recibido por el presidente norteamericano Joe Biden y su esposa Jill.
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