La vicepresidenta Cristina Kirchner difundió un mensaje del Papa Francisco quien pidió a los laboratorios que liberen las vacunas contra el coronavirus, a los medios de comunicación que terminen con las noticias falsas y a los organismos acreedores que condonen las deudas de los países pobres.
"A los grupos financieros y organismos internacionales de crédito, pido que permitan a los países pobres garantizar las necesidades básicas de su gente y condonen esas deudas tantas veces contraídas contra los intereses de esos mismos pueblos", señaló el Papa en el IV Encuentro Mundial de Movimientos Populares.
A través de un videomensaje, el pontífice pidió la implementación de "un ingreso básico, el IBU, o salario universal para que cada persona en este mundo pueda acceder a los más elementales bienes de la vida".
"A las grandes corporaciones mineras, petroleras, forestales, inmobiliarias, agro negocios, pido que dejen de destruir la naturaleza, dejen de contaminar, dejen de intoxicar los pueblos y los alimentos", afirmó.
"A los medios de comunicación, pido que terminen con la lógica de la post-verdad, la desinformación, la difamación, la calumnia y esa fascinación enfermiza por el escándalo y lo sucio; y que busquen contribuir a la fraternidad humana", agregó.
En su mensaje, el Papa sostuvo que "hay que analizar seriamente" la propuesta de "la reducción de la jornada laboral" y, en ese sentido, consideró que "no puede haber tantas personas agobiadas por el exceso de trabajo y tantas otras agobiadas por la falta de trabajo".
"En el siglo XIX los obreros trabajaban doce, catorce, dieciséis horas por día. Cuando conquistaron la jornada de ocho horas no colapsó nada como algunos sectores preveían. Entonces, insisto, trabajar menos para que más gente tenga acceso al mercado laboral que es un aspecto que necesitamos explorar con cierta urgencia", basó su reclamo.
"Considero que son medidas necesarias, pero desde luego no suficientes. No resuelven el problema de fondo, tampoco garantizan el acceso a la tierra, techo y trabajo en la cantidad y calidad que los campesinos sin tierras, las familias sin un techo seguro y los trabajadores precarios merecen", defendió el Papa, en línea con el reclamo de las denominadas "3T" (Tierra, Techo y Trabajo) que se han convertido en el principal reclamo de los movimientos populares.
El de hoy fue el cuarto encuentro entre el Papa y los representantes de los movimientos populares de todo el mundo, que, entre otros, congregan a trabajadores de la economía informal, cartoneros y agricultores, tras las reuniones de 2014 y 2016, en el Vaticano, y de 2015 en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
De todos modos, según Francisco, las propuestas "tampoco van a resolver los enormes desafíos ambientales que tenemos por delante", pero las mencionó "porque son medidas posibles y marcarían un camino positivo de orientación".
A lo largo de su discurso, el Papa dio además una lista de pedidos de cara a la salida mundial de la pandemia de coronavirus. Así, reclamó "en nombre de Dios a los grandes laboratorios que liberen las patentes" farmacéuticas.
"Tengan un gesto de humanidad y permitan que cada país, cada pueblo, cada ser humano tenga acceso a las vacunas. Hay países donde sólo tres, cuatro por ciento de sus habitantes fueron vacunados".