Tras el pedido de quite de concesión, Edesur recibió una nueva denuncia

La situación de Edesur está cada vez más complicada. Un día después de que la Defensoría del Pueblo bonaerense solicitara la rescisión del contrato producto de los sucesivos cortes de luz, baja de tensión y falta de inversión, el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, denunció a la empresa distribuidora por no cumplir un contrato firmado en 2015. En ese entonces, la compañía se comprometió a construir una subestación eléctrica para mejorar la calidad del servicio ante la creciente demanda pero la obra no se inició.

Según detallaron desde el Municipio, se le cedió a Edesur un terreno localizado en el Parque Industrial de Luis Guillón para llevar adelante la obra. El espacio cumplía con los requerimientos solicitados por la empresa. El contrato se firmó el 14 de enero de 2015, "tras innumerables e injustificadas dilaciones para recibir dicho espacio por parte de" la distribuidora.

Con el convenio, se cedió a la empresa el uso gratuito del predio para avanzar en la construcción de la subestación en un plazo máximo de cinco años, con el compromiso municipal de tramitar autorizaciones y permisos de obra necesarios. Sin embargo, pasó el tiempo acordado, no se inició la construcción y el municipio optó por avanzar con la denuncia. La falta de cumplimiento del contrato, explicaron, redundó en la pobre calidad del servicio actual, con cortes de energía y problemas de tensión. 

El acuerdo de ocho páginas estipuló la cesión gratuita del predio para "colaborar en el desarrollo energético" de la zona y contribuir al "bienestar general de la población". Objetivo que se lograría mediante la construcción de una subestación transformadora.

En la cláusula cuarta se manifestó la obligatoriedad de "no extender más allá de los primeros cinco años, a partir de la fecha de la firma presente, las obras de construcción de la estación transformadora bajo pena de considerar incumplido el presente contrato y dejar de usufructuar el terreno”. El convenio era de 20 años pero, al no cumplir con las tareas, cayó.

Voceros de Edesur negaron las acusaciones. Ante la consulta de El Destape, aseguraron que "no hay incumplimiento de contrato. Lo que muestra el municipio es un acuerdo de cesión de un terreno. Debido a que la obra llevaría años y ante la necesidad de mejorar el servicio a la gente en forma inmediata, se repotenció la subestación Transradio, desde donde se tendieron cables de media tensión para Esteban Echeverria". Además, argumentaron que "se amplió la propia subestación de Esteban Echeverria y se amplió la SE Spegazzini, que lleva cables de media tensión dentro de Ezeiza pero también a Echeverria. No obstante esto, está en marcha la licitación de la Subestación Guillon".

Desde el Ente Nacional de Regulación de la Energía (ENRE) explicaron a El Destape que están trabajando junto a la distribuidora y los municipios mediante mesas técnicas, esta semana hubo dos reuniones con las gerencias zonales de Edesur del Gran Buenos Aires y representantes de las comunas. Hasta el momento, las tareas están abocadas a realizar un relevamiento de las obras y coordinar los trabajos para mejorar el servicio en los puntos críticos, lograr un equilibrio de carga en los medidores de barrios populares y disponer una plataforma a disposición de cada gobierno para ingresar los reclamos de forma online y que queden asentados en las bases de datos de las compañías.

Ayer, la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires solicitó al ENRE el quite de la concesión a Edesur  por considerar que la distribuidora “no se encuentra en condiciones de prestar el servicio”. Situación evidenciada por los numerosos cortes de luz que afectan, principalmente, a la zona sur del conurbano, bajas de tensión y falta de inversión.

El titular de la Defensoría, Guido Lorenzino, argumentó que las instancias de diálogo con la empresa ya fueron agotadas dado que se intentaron mediaciones con los municipios afectados, se promovieron acciones judiciales, reuniones en la sede del organismo que preside y se aplicaron multas, por lo que consideró que la empresa “no cumple con la prestación adecuada del servicio público a su cargo, en condiciones de regularidad, calidad técnica adecuada y continuidad”. Por eso, le solicitó “a la autoridad concedente y de contralor la rescisión de la concesión oportunamente otorgada verificando las causales objetivas” expuestas y las nuevas que puedan incorporarse. Una situación que exigieron sea “evaluada de manera urgente” para constatar si corresponde, teniendo en cuenta los antecedentes.

Desde Edesur, argumentaron que desde 2016 lograron reducir los cortes en un 40%, que invirtieron 720 millones de dólares, repotenciaron 10 subestaciones, 259 centros de transformación, 1.032 telemandos y se renovaron 1.100 kilómetros de red. Además, sostuvieron que sus ingresos y ganancias fueron reinvertidos “para acelerar este proceso de mejora, aportando recursos extraordinarios en los años de adversidad macroeconómica, como en 2019 con 100 millones de dólares financiados por nuestro accionista ENEL”.

También intentaron justificar que el mal servicio se debe a un “estrés extraordinario de la red eléctrica” porque, con la cuarentena, hay consumo de luz en lugares y horarios en los que antes no había. Sin tener en cuenta que la demanda de las fábricas o comercios disminuyó notablemente producto del aislamiento. Como dicen en Twitter, una PlayStation o un televisor no consumen más que una industria.