La noticia conmocionó a toda la región. El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, confirmó que contrajo coronavirus después de minimizar el impacto del COVID-19 y militar contra medidas restrictivas de prevención. El mandatario argentino, Alberto Fernández, le envió una carta para expresar su deseo por una pronta recuperación y pedir que se extremen los cuidados en el país vecino.
"Con mucho pesar he tomado conocimiento que ha sido afectado por el COVID-19. Quiero expresar mis deseos de que muy pronto se recupere", comenzó el mandatario.
En una carta de cuatro párrafos, Fernández analizó que "la peligrosidad de esta pandemia queda manifiesta en los niveles de contagio. Este virus no distingue entre gobernantes y gobernados. Todos y todas estamos amenazados y por eso deben extremarse los cuidados".
El mensaje fue contundente y claro. La necesidad de cuidarse, sostuvo el mandatario argentino, fue entendida por los "pueblos que enfrentan esta tragedia con entereza y responsabilidad". Por eso, sostuvo que "en esta hora difícil" reciba su saludo y solidaridad con todos los ciudadanos de Brasil.
La firma de la carta no es menos destacable: "Sinceramente", como el libro de su vicepresidenta Cristina Kirchner, "Alberto Fernández" escrito con lapicera azul.