Ante la disparada de casos en la provincia de Buenos Aires por la segunda ola de coronavirus, y frente a las nuevas restricciones que rigen en los 40 distritos del AMBA, el gobierno provincial incorporó 250 nuevas camas de terapia intensiva y 1.565 trabajadores y trabajadoras de la salud comenzaron a trabajar desde este viernes y lo hará, en primera medida, hasta el mes de mayo inclusive.
La escalada de infecciones se traduce a corto plazo en un incremento de las internaciones, es por ello que, frente a la acelerada velocidad de los contagios que trae la segunda ola de coronavirus el ministerio de Salud implementó nuevas medidas que buscan evitar el colapso sanitario.
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Actualmente, la ocupación actual en las Unidades de Terapia Intensiva (UTI) es del 72% en el AMBA y del 64% en el resto de la Provincia. El sistema de salud bonaerense cuenta con 1.570 camas libres, de las cuales 814 corresponden al Área Metropolitana. Vale remarcar que la Provincia de Buenos Aires cuenta con un tablero integrado de ocupación de camas UTI, es decir, con información en tiempo real del nivel de ocupación, tanto en el subsector público como privado.
Con la nueva ampliación el sistema público de salud habrá pasado de 883 camas públicas en la prepandemia (diciembre de 2019) a 2.433 para mediados de mayo de este año, es decir, un incremento del 275% en la capacidad de atención de casos graves. Si a esto se suman las 2.206 camas de terapia intensiva del subsector privado de la salud, el total de plazas de UTI en la Provincia alcanzará las 4.639 en total.
Al inicio de la pandemia, cuando en los hospitales públicos bonaerenses, tanto provinciales como municipales había un total de 883 camas de UTI, el gobierno de Axel Kicillof decidió sumar 1.300 plazas más. Ahora incorporó otras 250 y se encuentra en la búsqueda de mayor cantidad de recursos humanos para poder sumar, a lo largo de este año, otras 400 plazas.
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Con un promedio diario semanal que supera los 10 mil casos confirmados, la Provincia está duplicando las cifras más altas del año pasado. Por eso, tanto el Gobernador Axel Kicillof como las autoridades sanitarias advirtieron que la situación actual “tiene más la forma de un tsunami que de una ola” y, en ese sentido, es clave que el Estado actúe, pero también “que todos y todas evitemos la circulación y reforcemos las medidas que previenen los contagios”.