A días del comienzo de una nueva etapa de aislamiento social obligatorio, el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, criticó las marchas de sectores anticuarentena a las que calificó como "cuestiones para el psiquiatra". Además, cuestionó el "centralismo porteño" y definió como "satisfactorios" a los resultados de su provincia, una de las que tendrá la posibilidad de retomar las clases presenciales durante agosto.
El 9 de julio, distintos sectores anticuarentena se movilizaron en el centro porteño y otras ciudades del país para manifestarse contra el aislamiento y el Gobierno. Algo que no se replica de forma general, sobre todo porque la mayor parte de la Argentina no está en una etapa restrictiva.
En diálogo con El Destape Radio, deseó dar pasos "firmes" para no "volver a una fase anterior". El Gobernador lamentó por el cierre de muchos comercios pero aclaró que la crisis "no es por la cuarentena" sino "por la pandemia", como lo señala siempre el presidente Alberto Fernández. "En los últimos años cerraron muchos también por malas políticas económicas, y por un centralismo que le dio la espalda al resto del país", agregó el mandatario.
"Cada persona que ingresa a trabajar tiene que hacer una cuarentena de 14 días, que en el caso del sector agropecuario no tenemos problemas de que lo haga en el campo y trabajando", explicó el gobernador y recomendó "que apoyen la producción de Santiago del Estero, durante 13 años no les cobramos impuestos. Que inviertan en casas en nuestra provincia".
Así le respondió a los productores que acusaron a las autoridades provinciales de retener su transporte: "Lo que menos haríamos es retener el transporte. Lo que quieren es la comodidad de ir y volver a su provincia sin aislarse, y eso no se lo vamos a permitir".