El primer tramo del nuevo año estará atravesado por la esperanza que genera el comienzo de la campaña de vacunación contra el COVID-19, pero también la preocupación por el rebrote de contagios y una crisis social profundizada por la pandemia. El margen de maniobra es limitado. “Es un trabajo de orfebre”, destacaron en la Casa Rosada.
En el gobierno nadie considera posible un confinamiento estricto ni masivo, pero si la segunda ola comienza antes de lo previsto en la Argentina, no se descartan nuevas restricciones y suspensiones de actividades, como ya ocurrió en varios países limítrofes y de Europa. En ese caso, aseguran que habrá recursos para asistir a los sectores de la sociedad que vienen castigados luego de un año que dejó indicadores dramáticos de pobreza, y también a las empresas que necesiten nuevos auxilios.
Fue el propio Ginés González García quien anticipó en El Destape Radio que la segunda ola de coronavirus puede llegar “mucho antes” de lo esperado y que “si seguimos con lo que estamos haciendo hace 15 días las cosas no van a mejorar". Dijo que, si bien “la vacuna es una gran esperanza”, hay que "continuar con los cuidados”.
El presupuesto 2021 no tiene proyectado un “paquete COVID-19” -como tampoco lo tuvo el 2020- pero si no se logra controlar el rebrote la política pública será flexible, y aseguran en el gobierno que el Estado estará con estrategias focalizadas para asistir mientras sea necesario.
“Seamos claros, si nosotros vemos que la economía, las empresas, los trabajadores, siguen necesitando ayuda, para nosotros eso es fundamental porque cuando sea que pase la pandemia, cuando eventualmente hayamos podido vacunar a todos, si no quedó nada en pie, ¿sobre qué construimos?”, aseguró la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco, en diálogo con El Destape.
“Proteger a las empresas y proteger a los trabajadores y trabajadoras en nuestro objetivo número uno”, destaca la economista. Y anticipa que, si vuelven las restricciones, el gobierno deberá redireccionar el gasto público, pero ahora con el aprendizaje del primer año de la pandemia. “No creo que haya un nuevo 2020, hemos aprendido mucho a gestionar la pandemia, pero no está superado y el Estado tiene una responsabilidad intransferible, en principio con la salud, y por supuesto en garantizar la viabilidad de las empresas y el trabajo”, explica Todesca Bocco.
También el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, anticipó en diálogo con El Destape que, ante la posibilidad de una segunda ola de contagios, “sin dudas habrá recursos del Estado para acompañar”. Destaca que en su área comenzaron el año con un presupuesto de 84.000 millones de pesos y finaliza con 240.000, con una ejecución del 300% anual para amortiguar el impacto de la crisis generada por la pandemia.
En ese sentido, el gobierno nacional continuará con la asistencia alimentaria de manera directa a través de comedores, merenderos, escuelas, y la posibilidad de expandir el alcance de la Tarjeta Alimentar que hoy reciben 1,7 millones de personas, en su mayoría mujeres. Las políticas alimentarias desarrolladas durante el 2020 tuvieron una inversión de más de 121.000 millones de pesos.
No se descarta un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) más focalizado que el original -pagado en tres oportunidades a unas 9 millones de personas- y ya está en marcha el programa REPRO en reemplazo del ATP (Asistencia al Trabajo y la Producción) para el pago de salarios del sector privado. También se incluye en ese paquete la ampliación de beneficiarios que reciben la Asignación Universal por Hijo (AUH).
Además de las políticas de asistencia económica a personas y empresas, habrá también un refuerzo sanitario, de las medidas preventivas, distribución de elementos de seguridad e higiene, para controlar el posible rebrote especialmente en los barrios que tienen mayores dificultades para cumplir con el aislamiento o distanciamiento social.
Se está realizando un relevamiento de vacunadores y promotores de salud que ya fueron un eslabón fundamental en la contención de la pandemia con el Programa de Emergencia Sanitaria “El Barrio Cuida al Barrio”. También las organizaciones sociales y la red comunitaria formarán parte del operativo de vacunación.
Ante el aumento de casos de coronavirus que se registran en la zona del Área Metropolitana Buenos Aires y algunas provincias, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, dijo que seguirán “tomando las medidas que sean necesarias para cuidar la salud de los argentinos” y remarcó que "están monitoreando permanentemente la evolución de los casos y del sistema de salud".
El sacerdote de la Iglesia Caacupé de la Villa 21-24, Lorenzo “Toto” de Vedia, señaló este fin de semana en El Destape Radio que “se sigue sintiendo la pandemia”, que “hay una mayoría de gente en las villas que tiene un deseo de cuidarse”, pero advirtió que “hay cierto hartazgo y la suba de los casos generan preocupación”.
“Hay una decisión del Gobierno nacional de ayudar y acompañar a la gente con decisiones políticas y sociales. Nosotros insistimos en que las medidas deben hacerse desde la cercanía. No hay que pensar las políticas desde los escritorios. Hay que hacerlo en el mano a mano con la gente. Y, en eso, si bien estamos mejor que con la gestión anterior, todavía falta”, concluyó De Vedia.
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