El presidente Alberto Fernández confirmó la extensión de la cuarentena hasta el 2 de julio, pero con cierta flexibilización. No obstante, advirtió que, si la situación se desmadra y los contagios aumentan sin control, no se dudará en volver a una cuarentena más estricta.
Desde la Quinta de Olivos, el mandatario detalló la situación epidemiológica en Argentina y cómo la cuarentena dio resultados positivos para el sistema sanitario que no colapsó, por ahora, y se encuentra en una “buena” situación. El objetivo es volver “a la normalidad” de forma “escalonada”, este es el primer paso.
“Les pedimos que se queden aislados en sus casas, que sigan cuidándose. Es posible que tengamos una mayor circulación de seres humanos, que es mayor circulación del virus y contagios. Cuanto más estemos en la calle, más riesgos corremos”, advirtió el jefe de Estado.
Asimismo, aseveró: “Los que estamos aquí queremos volver cuanto antes a nuestra vida habitual, pero queremos preservar la vida de los argentinos y que a nadie le falte una cama o respirador. Vamos a seguir trabajando con ese objetivo”.
Subrayó, además, que “ahora se va a tratar de volver a la normalidad, sabiendo que se ha logrado relentizar los contagios y el uso de camas en hospitales”; pero aclaró: “Si hay que volver hacia atrás, volveremos atrás, si debemos ajustar, ajustaremos más”.
Como adelantó El Destape, el Gobierno provincial, nacional y de la Ciudad de Buenos Aires apelan a la responsabilidad ciudadana en mantener los cuidados necesarios para prevenir los contagios.