Por el crimen de dos jóvenes, descabezaron a la Policía de Córdoba y nombran como jefa a una mujer

Es la comisario general Rita Zárate Belletti, y comandará una fuerza de 23 mil efectivos. Ocurre tras los crímenes de Blas Correas y Joaquín Paredes.  

02 de noviembre, 2020 | 13.28

La comisario general Rita Zárate Belletti se convirtió en la nueva jefa de la Policía de Córdoba. Es la primera mujer en asumir el cargo máximo de esta fuerza de 23 mil efectivos. Su nombramiento es consecuencia de los asesinatos de dos adolescentes a manos de la Policía, en sólo 80 días: el jueves 6 de agosto pasado, en pleno centro de esta Capital murió baleado por la espalda Blas Correas, un chico de 17 años; y el pasado domingo 25 de octubre, la nueva víctima de gatillo fácil fue Joaquín Paredes, un adolescente de 15 años, asesinado por policías de Paso Viejo, un pueblito del norte cordobés de poco más de 1.000 habitantes.

El nuevo subjefe de la Policía cordobesa es el comisario general Ariel Darío Lecler, que proviene del grupo de elite ETER y hasta el viernes se desempeñó en el área de Formación Profesional.

El nombramiento de Zárate Belletti como la nueva jefa de la Policía de Córdoba, busca humanizar una fuerza que está ligada a la corrupción, el tráfico de drogas, aprietes al poder político y gatillo fácil. Por caso, durante la cuarentena por la pandemia por el Covid-19, fueron asesinados por la Policía cordobesa seis jóvenes, por caso, uno de ellos, Luis Morenigo (31), un delincuente fue muerto el 31 de agosto pasado en un procedimiento en el que el muchacho estaba desarmado. El caso no tuvo trascendencia social ni mediática, como los de Blas Correas y Joaquín Paredes, porque la víctima de gatillo fácil tenía antecedentes delictivos.

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Por el crimen de Blas están imputados 13 policías, de los cuáles nueve están presos: los dos que dispararon, las dos mujeres que los acompañaban en sus patrullas, un subcomisario que encubrió el crimen e intentó ensuciar a las víctimas plantando un arma; y otros cuatro por falso testimonio. Además están imputados tres empleados de una clínica que no le prestó atención médica a Blas.

Por el asesinato de Joaquín están presos cinco policías de Paso Viejo. En la escena del crimen, se recolectaron cerca de 30 casquillos de balas calibre 9 milímetros. El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla envió a dos abogados cordobeses para investigar este caso de violencia institucional: Gerardo Battistón y Claudio Orosz. Battistón también trabaja en el crimen de Morenigo, ocurrido en Alta Gracia.

Los vecinos de Paso Viejo les contaron a los abogados del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación que de los cinco policías detenidos por el asesinato de Joaquín, cuatro habían dado positivos al test de alcoholemia y otro al de estupefacientes.

En el primer semestre de 2020 ya habían sido víctimas de gatillo fácil de la Policía cordobesa Franco Sosa, Gastón Mirabal y José Antonio Avila.

Un maquillaje a la fuerza

Ahora, tras el asesinato de Joaquín Paredes, cuando la sociedad civil volvió a reclamar cambios estructurales, Schiaretti apeló nuevamente al maquillaje y ascendió a Zárate Belletti como la nueva y primera jefa de la Policía de Córdoba.

“El crimen de Blas Correas fue una excepción”, “los policías están bien formados”, aseguró en una entrevista con el diario cordobés La Voz del Interior, la comisaria mayor Liliana Zárate Belletti tras asumir como flamante jefa de Seguridad Capital, tras el homicidio de Blas, como una forma de descomprimir la presión social y mediática. Eso no era cierto, y quedó demostrado con los crímenes de Luis Morenigo y Joaquín Paredes.

Luego, Schiaretti habló: “Ante los dolorosos casos, fruto del accionar policial, ocurridos con Blas Correas y Joaquín Paredes y respetando siempre la investigación judicial, es que he instruido al ministro de Seguridad, que además de la modificación del protocolo del uso de armas de fuego por parte de la Policía, realice los cambios necesarios para su funcionamiento y se vea nuevamente la currícula y el tiempo de formación de los policías de la provincia de Córdoba consultando a los expertos, como corresponde”. El gobernador agregó: “Por eso he recibido a la nueva jefa de la Policía de la Provincia de Córdoba, la comisario general Liliana Zárate Belletti. Ella tendrá la tarea de servir a la comunidad y de hacerlo brindándole seguridad, con una Policía que debe ser profesional y vocación de servicio". 

Durante la semana, el ministro Mosquera, salió a los medios y anunció que “el gobernador tiene a su disposición mi renuncia”, e inmediatamente un “Nuevo Protocolo de Actuación Policial”, del que habló Schiaretti, un documento de 20 páginas que establece, entre algunas cuestiones que “el derecho superior de toda persona es la vida, por eso este protocolo ratifica una vez más el uso de arma de fuego como una excepción y solo cuando median cuestiones importantes y legislaciones expresas”.

Polémica por el nuevo protocolo

El nuevo reglamento sólo recibió críticas de la gente, los organismos defensores de Derechos Humanos, los partidos de la oposición y hasta de policías y ex policías.

En agosto de 2017, ya se había puesto en marcha otro protocolo similar, tras el crimen de Franco Amaya en abril de ese año en Villa Carlos Paz. Franco había sido asesinado por policías en un control vehicular; y se determinó que ambos asesinos habían consumido alcohol y estaban apostados con sus armas en un operativo de control vial.

La subdirectora de Programas Especiales del Ministerio de Seguridad cordobés, Mariana Carbajo, una de las redactoras del nuevo protocolo policial, le dijo a la agencia Télam que en la provincia mediterránea “tenemos un montón de efectivos con causas judiciales vinculadas al mal uso de la fuerza. Necesitamos policías que obedezcan y se ajusten a la ley, pero también que sean profesionales con capacidad de reflexionar y poder tomar decisiones”.

Luego del crimen de Joaquín Paredes, la mamá de Blas Correas, Soledad Laciar, le dijo a El Destape: “Uno no puede hacer mucho más allá de compartir el mismo dolor y decirles que no están solos”. Y agregó: “La Policía debe estar formada y actuar como dice la ley. No pueden dispararle a un pibe de 15 años como Joaquín por la espalda. Como tampoco pudieron dispararle a Blas por la espalda. Queda claro que así es como se maneja la Policía. Si el caso de Joaquín hubiese pasado cinco meses atrás, no tenía la repercusión que hoy tuvo”, afirmó Soledad Laciar.

La madre de Blas Correas advirtió que “tiene que haber un cambio real en la formación de la Policía. Si algo pasa en la calle, nuestros hijos deben tener confianza en acudir a los policías, que sean ellos los primeros en llegar. Pro no sucede eso, los que nos tienen que cuidar son quienes asesinan a nuestros hijos. Un policía con tres meses y sin haber tirado un arma no puede portarla”.

Quién es Rita Zárate Belletti

La flamante Jefa de Policía egresó en 1992 de la Escuela de Policía “Libertador Gral. Don José de San Martín”, la primera promoción de tres años, lo hizo como técnica en seguridad pública. Además es licenciada en Seguridad egresada de la Universidad Nacional de Villa María.

Se desempeñó en la Comisaría 11ª de barrio Alto Alberdi de esta Capital; fue instructora de la Escuela de Cadetes, Directora General de Investigaciones y Directora de Drogas Peligrosas. También estuvo al frente del Centro de Comunicaciones y Videovigilancia durante 12 años y fue oficial Superior en Bienestar Policial, el Policlínico Policial y en la Dirección de Formación Profesional. Fue Directora General de Recursos Humanos y miembro del Consejo Asesor de formadores Policiales; por lo que gran parte de los policías sumariados por excesos o crímenes por gatillo fácil como los cometidos en 2020 fueron formados por la nueva jefa policial.

Está casada con Ariel Prandi, un oficial principal que fue pasado a retiro obligatorio, luego de ser investigado por la División Robos y Hurtos de la propia Policía. Prandi fue sometido a investigación interna y los casos se cerraron cuando lo pasaron a retiro.