El Consejo de la Magistratura suspendió hasta mañana la jura de los dos representantes políticos que restan para completar la nueva integración de 20 miembros, con impugnaciones cruzadas desde el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, que aspiran a conseguir los dos asientos en discusión. Como titulares del Senado y de Diputados, Cristina Kirchner y Sergio Massa firmaron las designaciones del senador peronista Martín Doñate y la diputada radical Roxana Reyes, que luego dispararon las discusiones desde uno y otro lado. La aspiración en el oficialismo es que queden confirmados ambos, con lo que afrontarán un Consejo en paridad de fuerzas.
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Una vez más, una jugada de la vicepresidenta tomó desprevenida a la oposición, que salió a exhibir su pataleo. "Los representantes de las minorías que deben ser designados en el Consejo de la Magistratura son las vigentes al momento del fallo de la Corte Suprema", fue el argumento de la mesa de Juntos por el Cambio, simulando una jurisprudencia. La división del bloque del Frente de Todos en dos sub bloques -el Nacional y Popular de 21 integrantes y el Unidad Ciudadana de 14- con un representante en la Magistratura para cada uno, remitió a lo que hizo el macrismo en 2015 al inventar una mayoría sumando varios bloques para designar como consejero a Pablo Tonelli. "La Corte Suprema tiene establecido que las decisiones que se adoptan dentro de la esfera de competencia propia de otro poder no admiten revisión judicial”, sostuvo entonces el juez Enrique Lavié Pico para avalar el nombramiento de Tonelli, antecedente aplicable a este nuevo caso.
Por eso, a primera hora de la tarde, Cristina y Massa firmaron la resolución que remitieron al presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, oficializando la designación de Doñate y de Reyes. Massa, se comentó, nunca estuvo de acuerdo con la posibilidad de repetir la jugada del Senado y dividir el bloque del oficialismo en Diputados. El presidente Alberto Fernández y -teniendo en cuenta su firma al pie de la resolución- también la vicepresidenta habrían coincidido con su postura y avalaron el nombramiento de la radical Reyes como representante de la segunda minoría.
Con todo, antes de preparar el escrito, habrían conversado con la dirigencia de la UCR para acordar los nombramientos. Es decir, consentir la designación de Reyes pero que el radicalismo también aceptara a Doñate, con lo que el perjudicado sería el senador macrista Luis Juez. Pero no salió tan lineal y hubo cuestionamientos. "Es que hay como cinco radicalismos diferentes, unos te dicen una cosa y aparecen otros que hacen otra", comentaban en el Frente de Todos. Rosatti recibió entonces otra carta, esta vez firmada por Juez y el jefe del sub bloque de senadores del PRO, Humberto Schiavoni. "Le solicitamos se abstenga de proceder a tomar juramento a cualquier senador que no sea el propuesto por el Bloque Frente Pro por la segunda minoría de esta Cámara", escribieron para impugnar el nombramiento de Doñate.
Al conflicto se sumó un nuevo elemento con la aparición en Diputados del jefe del bloque del Frente de Todos, Germán Martínez. "Hace minutos hablé con el presidente de la Cámara de Diputados y le transmití que no estoy de acuerdo con la resolución firmada respecto de la designación de la diputada Roxana Reyes de la UCR como integrante del Consejo de la Magistratura”, informó desde el Salón de los Pasos Perdidos. El argumento de Martínez fue de estricto sentido común: el bloque mayoritario de 118 integrantes tendrá un consejero, con menos diputados la oposición tendrá dos y el Interbloque Federal, de apenas 8 legisladores, está representado por Graciela Caamaño. No se ve equitativo.
En verdad, la aparición de Martínez estaba consensuada con Massa como una forma de equilibrar presiones. Así como Juntos por el Cambio mantiene la impugnación sobre Doñate, el Frente de Todos mantendrá la suya sobre Reyes, con argumentos contundentes además. Así las cosas, esperan que la Corte Suprema resuelva hoy la jura de los legisladores designados por los presidentes de ambas Cámaras del Congreso. "Sería una intromisión sin precedentes si la Corte interviene también en esto, es una decisión interna de la Cámara", sostenían en el Senado.
Con el nombramiento de Doñate, un senador chubutense cercano a la vicepresidenta, el Frente de Todos confiaba en mantener un número de equilibrio en este Consejo que funcionará durante algunos meses. "Ibamos a perder dos asientos, así por lo menos quedamos emparejados", respondían cerca de Cristina. La sorpresiva jugada, comentaban, sirvió para mostrar que "siempre está activa y haciendo política". Igual lamentaban que por culpa de una sentencia de la Corte hoy el tema de discusión sea la integración del Consejo de la Magistratura, cuando debería ser la crítica situación económica y el impuesto a la renta inesperada dispuesto como paliativo por el Gobierno.
En medio de todo esto, todavía queda por delante el debate en Diputados del proyecto que ya tiene media sanción para reformar el Consejo, con una integración de 17 miembros. "El objetivo es poner en tratamiento cuanto antes la nueva ley", adelantó Germán Martínez.