Si los números cierran, el martes de la semana que viene un sector de la oposición va a intentar exponer al Gobierno y su falta de interés en impulsar el Presupuesto 2025. Se pidió una sesión para tratara la derogación del decreto que permite la toma de deuda sin pasar por el Congreso y, al mismo tiempo, pedir una prórroga de sesiones ordinarias para discutir la ley de leyes.
Como anticipó ayer El Destape, desde Democracia para Siempre, Encuentro Federal y Unión por la Patria se empezó con el poroteo minucioso para conseguir los 129 necesarios que habiliten el quórum en Diputados. Finalmente, se habla de un acuerdo con lo gobernadores para habilitar la sesión.
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Las dos últimas semanas parlamentarias se orientan en ese sentido: este miércoles, el oficialismo y amigos buscaron dejar en evidencia a “la máquina de impedir el cambio”, como calificó Cristian Ritondo, y, la semana que viene, los opositores intentarán hacer lo mismo con el gobierno.
En la previa a la sesión del miércoles se especuló con ausencias, para el quórum, de Democracia para Siempre y Encuentro Federal. Sorprendieron, ambos, con sus presencias en las bancas. Durante la noche anterior al debate se inauguró, en redes, un ataque a estos sectores sólo por los trascendidos. Fueron respondidos con una foto desde el hemiciclo.
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Fue Facundo Manes el que llegó temprano, antes de la sesión, convencido de que lo mejor era bajar para habilitar el quórum. Nadie intentó convencerlo de lo contrario, así que la decisión estuvo más que clara desde un comienzo. Una vez adoptada esta postura, se conversó con el espacio que comanda Miguel Ángel Pichetto que terminó por aportar a casi todos sus miembros. Estos sectores, principalmente los de extracción radical, son promotores de la ley de ficha limpia. Fue promesa, de hecho, durante la campaña del 2021 por lo tanto, por una cuestión de coherencia, no podían estar ausentes en este debate.
La pulseada final de 2024
La semana que viene estará cargada de últimas intenciones. Los opositores , para forzar un tratamiento por el Presupuesto el martes. Para el miércoles, ya fue pedido un encuentro en el recinto para tratar la ley de ludopatía y, como ya advirtieron el PRO y amigos, también se apuntará a reeditar el debate por ficha limpia.
El Presupuesto 2025 es una de las preocupaciones centrales a la hora de pensar la extensión del debate parlamentario. Algunos ya salieron a expresarse para bancar al gobierno, ese grupo fue definido como "radicales buenos" por parte de Juliana Santillán, diputada libertaria. El que inició la jugada fue Luis Picat, un cordobés con peluca que calificó a la ley de leyes como "sumamente necesaria" y anticipó su acompañamiento a una propuesta de "equilibrio fiscal".
El mensaje fue replicado por otros colegas que supieron separarse de la línea radical para apoyar al gobierno. El catamarqueño Francisco Monti sostuvo que "la ley de leyes debe aprobarse sin alterar la regla del equilibrio fiscal", mientras que el neuquino Pablo Cervi aseguró que se trata de una hoja de ruta "responsable que marca el rumbo económico que nuestro país necesita".
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En el Senado, la situación atraviesa un momento extraño. La Cámara Alta está paralizada y podría quedar así hasta el final del período ordinario. Hasta el momento, lo único que está confirmado es la visita de Guillermo Francos para dar su informe de gestión pero, pese a los rumores, todavía no fue oficializada la chance de una sesión, el jueves que viene. Hay temor ante la posibilidad de que Unión por la Patria y aliados quieran voltear el decreto de deuda sin pasar por el Congreso.
La Cámara Alta tiene pendiente el tratamiento de los pliegos de los jueces de la Corte Suprema, Ariel Lijo y Manuel García Mansilla. En principio, solo uno de los dos podría tener acuerdo con, en paralelo, una negociación para ampliar el máximo tribunal de Justicia.
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