Al presidente Javier Milei le tomó apenas poco más de seis meses que el Poder Legislativo le apruebe dos leyes para su plan anti-Estado y desregulador de la economía, gracias a la colaboración de bloques con mayor o menor grado de afinidad ideológica. Fue un proceso tan extenso que, allá por abril, ya había referentes de las bancadas que no escondían su fastidio y descontento: "Están todos hinchados las pelotas".
Sin embargo, el largo camino que tomó el proyecto de la Ley Bases desgastó las relaciones del oficialismo de La Libertad Avanza (LLA) con otros bloques legislativos de la oposición y, a su vez, la vida interna de estos. La season finale de la ex Ley Ómnibus, estiman, marca el fin de una forma de relación de los mileistas y los todavía denominados "dialoguistas".
El oficialismo de la Cámara de Diputados transpiró en horas de la tarde por el capitulo V del paquete fiscal, que resintala la cuarta categoría de Ingresos Brutos. A la task force de LLA en la Cámara baja compuesta por la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; el jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el vicejefe de Gabinete, José Rolandi y la secretaria de Planeamiento Estratégico, María Irazabal Murphy, se le sumó la presencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel.
"Estamos aliviados, cumplimos con el Presidente", comentaron a El Destape voces que conocen la interna de los representantes del Gobierno en la Cámara baja. En estos seis meses, el bloque de LLA tuvo la traumática salida del primer jefe de bloque, Oscar Zago y otros dos legisladores más y el reemplazo por Gabriel Bornoroni, a instancias del titular de Diputados, Martín Menem, y la hermana del mandatario. En el medio, el debut legislativo de la mayoría de la terna de legisladores de LLA.
Mientras se trataba la ley, voces del oficialismo comentaban que el Presupuesto 2024 se imponía en una futura agenda del Gobierno en el Congreso. También conjeturaban que si Milei comienza a mostrar mejoras en la economía, la colaboración a casi libro cerrado se mantendrá. "Creo que ahora se termina la luna de miel, porque nos apoyaron, más que nada, por la presión social", opinaron otras voces de las autoproclamadas "fuerzas del cielo". Ahora también comienza una actividad menos monotemática en la vida del bloque, en la que se pueden empezar a ver matices internos.
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"Hasta acá llegamos: a partir de acá, es ley por ley artículo por artículo", comentaban desde el PRO, el partido que ejerció la tutela legislativa de LLA. El distanciamiento va en paralelo con la separación que plantea el titular del partido amarillo, Mauricio Macri.
Macri pasó de acercar al PRO al Gobierno, dando lugar a un inminente desembarco en la gestión de la 'motosierra', a marcar la aprobación de la ley bases como el día 0 de la nueva relación. "El Gobierno nacional tiene ahora las herramientas para avanzar a la velocidad que la situación necesita", publicó en su Twitter el ex mandatario este viernes.
A partir de la convención del partido, que se realizará esta semana, Bullrich dejará de tener vínculo con el PRO, siendo esto lo más parecido a una relación entre los miembros del partido de Macri y el mileismo. Desde el partido amarillo se encargaron de adelantar que en su agenda está impulsar los proyectos en materia educativa que redactó el diputado Alejandro Finocchiaro.
"La incomodidad de los nuestros es total. Ya le dimos las herramientas, ahora le toca a Milei", comentaban en los pasillos de Diputados voces del radicalismo. El partido centenario tuvo sus choques internos entre el jefe de bloque, Rodrigo De Loredo y su vocación de acompañar las leyes del Gobierno -al igual que los gobernadores-, el sector díscolo del diputado Facundo Manes y -en menor medida- los legisladores de Evolución, corriente interna que lidera el senador nacional Martín Lousteau.
"Está claro que ya no hay más excusas, con lo cual ahora el Congreso va a poder dedicarse a otros temas y ya no girar tanto alrededor de Bases como sucedió hasta acá. Y además todo está muy atado a cómo le vaya en la gestión a Milei. En la medida en que los problemas crezcan, cada vez se le animarán más", comentaron a El Destape fuentes de la UCR, ya con la ley aprobada.
Las rispideces internas que provocaron los seis meses de la ley Bases en el recinto hicieron que, en algún momento, se rumoree una revocación de mandato de De Loredo en la jefatura de bloque. Hoy esa posibilidad aparece descartada en el horizonte.
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Desde el variopinto bloque de Hacemos Coalición Federal (HCF) creen que la actividad en el Congreso se va a calmar en julio. Más allá de esto, estiman que la relación de esta bancada del lote dialoguista con el Gobierno cambiará. "Quedo muy herido todo", acotaron.
El bloque que lidera Miguel Ángel Pichetto tuvo tres disidencias marcadas en Ganancias y Bienes Personales: en los socialistas Mónica Fein y Esteban Paulón y la cordobesa Natalia De la Sota; además tanto HCF como la Coalición Cívica vieron languidecer el artículo 111, que tenía por objetivo impactar en el régimen de Tierra del Fuego. "Fue más una cuestión de gentileza con el dialoguismo", comentaban desde el oficialismo en la tarde del jueves, cuando era imposible conseguir más de dos tercios para sostener ese punto del paquete fiscal.
Si bien circuló la versión de que Hacemos Coalición Federal iba a sumarse a los bloques de Innovación Federal y el representante del Movimiento Popular Neuquino, hoy voces que conocen la vida interna de la bancada que lidera Pichetto señalan que "eso se enfrió".
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Fuera del lote de dialoguistas está Unión por la Patria (UxP), que -al igual que el Frente de Izquierda y de Trabajadores - Unidad (FIT U)- se inclinaron por el rechazo desde el día uno. Sin embargo, al peronismo se le escaparon tres votos a favor y una abstensión en la votación por la restitución del Impuesto a las Ganancias.
Los cuatro aludidos son de Catamarca: Sebastián Nóblega, Fernanda Ávila, Dante López Rodríguez y Silvana Ginocchio (que se abstuvo). Según relataban en los pasillos de Diputados, el miercoles hubo una reunión del bloque en la que los legisladores de algunas provincias del Norte explicaron las ventajas que tenían para sus territorios la aprobación del RIGI, puntualmente, en materia de minería.
Si bien desmienten un intento por expulsar a los catamarqueños, se reconoce puertas adentro que cayó mal esta postura. "Silencio stampa", comentaron en estricto off the record voces de la bancada peronista. De todos modos, ven como eje de la disidencia de los diputados el entendimiento entre el Gobierno nacional y el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil. "No necesitaban votar, pero lo hicieron. Es difícil justificarlos", reconocieron.
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