El candidato de Santiago Caputo: García-Mansilla se fue sin pliego del Senado

Al igual que Ariel Lijo, el candidato a ministro de la Suprema Corte del gobierno de Javier Milei todavía no tiene el acompañamiento en la comisión de Acuerdos para que se trate su designación. Cuestionamientos a su vínculo con el asesor presidencial. 

28 de agosto, 2024 | 20.54

Una semana después de la audiencia de la comisión de Acuerdos del Senado de la Nación en la que se analizó la postulación del juez Ariel Lijo, le tocó este miercoles el turno al otro candidato a ministro de la Corte Suprema de Justicia enviado por el Gobierno nacional, Manuel García-Mansilla.

El juez, que reveló quién lo respaldó para ser candidato al máximo triubunal, se fue de la audiencia sin el dictámen, aunque con un panorama un poco más favorable que el otro postulante enviado por el gobierno del presidente Javier Milei. En ese contexto, hubo aspectos de la trayectoria académica y profesional de García-Mansilla que no convencieron a parte de los legisladores.

García-Mansilla recibió 265 preguntas en presentaciones realizadas a la comisión, además de 6 adhesiones y 23 impugnaciones. Si bien no se firmó el dictámen para que su pliego se trate en el recinto, fuentes parlamentarias señalaron que hay tiempo para que se pueda hacer.

Fuentes de bloques de la oposición del ya extinto "dialoguismo" coincidieron en su apreciación favorable respecto al candidato, aunque no pudieron afirmar que esto se traslade a sus bloques. Más allá de esto, subrayaron el contraste con Lijo, en cuya audiencia no convenció a voluntades por fuera del oficialismo de La Libertad Avanza (LLA).

"Esperemos que nos acompañen. Necesitamos dos tercios", confió una voz del oficialismo. Pese a la voluntad de LLA, una vez más, el senador Francisco Paoltroni volvió a expresar sus diferencias. "Yo creo que la República nunca estuvo antes en pelígro", dijo, antes de dejar el recinto.

Del lado del interbloque de Unión por la Patria se desligaron de la elección del candidato. "Es problema de ellos", aludiendo a LLA. El peronismo tuvo un ausente en la jornada en la comisión de Acuerdos: el jefe del interbloque José Mayans.

El senador nacional por Formosa se había trenzado en una pelea dialéctica con la ex presidenta Cristina Kirchner por un gesto de complicidad en la última sesión del Senado con la vicepresidenta Victoria Villarruel. "Mayans está en la provincia", comentaron desde la bancada peronista.

Como sea, el peronismo se encargó de hacer que García-Mansilla revele quién le acercó la propuesta laboral. "El cargo me lo ofreció (el asesor presidencial) Santiago Caputo, en una reunión con el señor (viceministro de Justicia de la Nación) Sebastián Amerio. No conozco al Presidente de la Nación, no hablé ni por teléfono", aseguró el juez.

Luego acotó que "no lo conocía" al hombre del cigarrillo apagado y que mientras preparó su presentación lo vio "dos veces", la última de ellas "hace dos semanas en Casa Rosada". "Me preguntó cómo venía preparandome para la audiencia pública y la relación desde el momento que me ofrecieron el cargo la llevo con Amerio", acotó.

Minutos después, durante su alocución, el senador de la Unión Cívica Radical (UCR) Martín Lousteau cuestionó que la oferta para ser ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación no le haya llegado al juez por medio del Presidente o un ministro, sino de manos de "un monotributista".

"Usted no es un juez independiente y académico, que es defender los intereses de un sector político, el macrismo, y viene a camino a ser la mayoría automática que en algún momento criticó", le espetó el senador de Unión por la Patria Oscar Parrilli, que le recordó que se desempeña como "director Ejecutivo de la Cámara de Exploración y Explotación de hidrocarburos".

El juez respondió que en esa cámara se dedicaba en la "coordinación de equipos técnicos". "Está muy lejos de mí tener un sesgo antoperonista", se excusó.

García-Mansilla fue consultado por varios tópicos como coparticipación federal, dolarización, cambio climático, constitucionalidad de los Decretos de Necesidad y Urgencia y la ley de legalización del aborto, a la cual se había opuesto

"No hablé de toda la ley. Creo en que hay que distinguir entre despenalización y legalización. A partir de eso confronté el artículo cuarto de la ley con ciertas normas de derecho positivo y marqué un conflicto entre normas de distinta jerarquía", intentó aclarar García-Mansilla.

También fue consultado sobre su postura respecto a la ley de Identidad de Género, a raíz de los dichos del ministro de Justicia, Mariano Cuneo Libarona, en Diputados, que afirmó que el gobierno mileista "rechazan la identidad sexual que no se alineen con la biología". El magistrado aclaró que la norma "está vigente".

"Lo que me está diciendo es que los delitos cometidos en la década del 70, no por el Estado, son prescriptibles y no imprescriptibles", le preguntó la senadora nacional de Unión por la Patria Juliana Di Tullio, a lo que García-Mansilla respondió "entiendo que si". Si bien no lo mencionó, esto aludió a los dichos de Villarruel que había afirmado que iba a "reabrir todas las causas del terrorismo".

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