Murió Germán Moldes, ex fiscal que encabezó las marchas por la muerte de Nisman

Había renunciado a fines de 2019 por problemas de salud, tras cobrar notoriedad por impulsar el esclarecimiento de la muerte de Alberto Nisman.

21 de noviembre, 2024 | 11.12

Germán Moldes, ex fiscal federal de Comodoro Py y uno de los principales impulsores de la causa por la muerte de Alberto Nisman, murió este jueves a los 77 años. Aunque no trascendió el motivo de su muerte, había debido renunciar a su cargo a fines de 2019 por problemas coronarios. 

Moldes había sido nombrado en su cargo en 1995. Había sido designado en su puesto de fiscal federal por el gobierno de Carlos Menem y luego pasó por los mandatos de Néstor Kirchner, Cristina Kirchner y Mauricio Macri. Trabajó como Asesor en la comisión de Legislación Penal de Diputados y en la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal.

La trayectoria política del fiscal Germán Moldes

En febrero de 2015, tomó notoriedad al convocar a la "marcha del silencio" por el esclarecimiento del caso por la muerte del fiscal Nisman, y realizó graves críticas públicas contra la expresidenta Cristina Kirchner en el último año de su gobierno.

El entonces fiscal Moldes fue quien, en el 2016, abrió una causa contra CFK y el ex canciller Héctor Timerman “por traición a la patria” a raíz de la denuncia que Nisman presentó poco antes de morir, acusándolos por la firma del Memorándum con Irán.

Luego, en 2017, se apartó de la causa que vinculaba a quien era el titular de la Agencia Federal de Inteligencia, Gustavo Arribas, quien se encontraba ligado al caso de corrupción brasileño llamado ‘Lava Jato’ y acusado de cobrar coimas.

Moldes también estuvo relacionado con la causa "Megacanje", por la cual el actual ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, fue sobreseído “por la deuda pública perpetrada en 2001”, durante la gestión del presidente Fernando de la Rúa, debido a que el fiscal no apeló.

En septiembre de 2019, Moldes fue operado en el Sanatorio de la Trinidad por tener la carótida derecha obstruida, y poco después, en noviembre de ese año, renunció formalmente a su cargo. Estaba casado y tenía cuatro hijos.

Antes, sin embargo, generó revuelo por algunas de sus decisiones que favorecieron al macrismo, como la desestimación de la apelación contra Gustavo Arribas, jefe de la AFI o el sostenimiento de la apelación que hicieron los fiscales Carlos Stornelli y Carlos Rívolo del procesamiento de Cristina Kirchner, que dictó el juez Claudio Bonadio en la causa de las fotocopias de los cuadernos.

Además solicitó que si la Cámara Federal de Apelaciones confirmaba la resolución del juez Bonadio de detener preventivamente a Cristina Kirchner, se le quiten los fueros a la senadora y sea detenida de manera "inmediata". Su frase más polémica la pronunció en septiembre de 2016. "No todos los que actualmente tienen el honor de llamarse jueces, lo merecen, no todos son rescatables, es necesario una desratización y una fumigación de este ambiente tan corrompido", aseguró.