Dura crítica de la Facultad de Exactas de la UBA a la privatización de Costa Salguero

El Consejo Directivo aseguró que estos proyectos inmobiliarios no solucionan el déficit habitacional y que la CABA tiene pocos espacios verdes.

11 de noviembre, 2020 | 18.52

A dos semanas de la audiencia pública no vinculante en la que se debatirá la privatización de Costa Salguero, la iniciativa de Juntos por el Cambio sufrió un nuevo golpe y sumó otro rechazo. En este caso, desde la Universidad de Buenos Aires repudiaron la venta de los terrenos y solicitó que en lugar de emprendimientos privados se emplace un gran parque público en el lugar.

Así lo sostuvo el Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Exactas UBA. En la declaración, las autoridades del órgano señalaron que, según el proyecto aprobado en primera instancia, la rezonificación permitirá la construcción sobre ese sector, disminuyendo el libre acceso al río.

Asimismo, entre los fundamentos, destacaron que la constitución de la Ciudad de Buenos Aires expresa en su artículo 8° que “los espacios que forman parte del contorno ribereño de la Ciudad son públicos y de libre acceso y circulación". Por otra parte, señalaron que esta no es una decisión aislada, ya que durante las administraciones del PRO en la Ciudad se vendieron 473 hectáreas a empresas privadas.

La resolución de la Facultad de la UBA se suma a las numerosas expresiones de colectivos sociales, ambientales y políticos que rechazan de manera tajante la privatización del río. La CABA es la segunda capital Latinoamericana con menos espacios verdes, con una proporción de 5,56 metros cuadrados por habitante, un tercio de lo que recomienda la OMS. Señalaron, además, que no se trata de una medida aislada "ya que durante esta administración se vendieron 473 hectáreas a empresas privadas, siendo la última venta en Diciembre pasado con la Ley N° 6.289 en la cual se autorizó la venta de 60 inmuebles de la Ciudad de Buenos Aires para proyectos inmobiliarios".

Los datos que rompen el negocio

En el documento, destacaron que los espacios verdes aumentan la calidad de vida dado que son "lugares de esparcimiento, porque ayudan a preservar fauna y flora nativa y a mitigar los efectos de la crisis climática como las inundaciones, y también porque reducen el efecto de las islas de calor generando una menor demanda de energía".

Por otro lado señalaron una problemática que evidenció El Destape ya que, "según el Instituto de Vivienda de la Ciudad, 1 de cada 10 inmuebles se encuentra vacío, 300 mil personas viven en villas y asentamientos y 7500 se encuentran en situación de calle, lo que denota un grave déficit habitacional; y que estos proyectos inmobiliarios, lejos de solucionar el problema habitacional, lo agudizan debido a que gran parte de las nuevas construcciones son viviendas de lujo"

Una deficiencia que "se ve en el aumento de la cantidad de inquilinos que pasó de 27,2% a 35,5% entre los años 2007 hasta el 2017 y que en el año 2015 había 200.000 personas (6% de la población) viviendo en villas o en condiciones precarias mientras al mismo tiempo había 65.000 viviendas desocupadas".