Escándalo en la Ciudad de Buenos Aires. Alejandro Pérez, quien ocupaba el puesto de Director General en el área social del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, fue despedido tras "saltarse la fila" en la vacunación por considerarse "trabajador esencial". El funcionario recibió la dosis de la vacuna contra el COVID-19 el pasado 30 de mayo, bajo dos argumentos: su edad (+ de 50 años) y que su mujer era persona de riesgo. A partir de esto, se sumó a la lista de los referentes de comedores populares que fueron inmunizados a fines del mes pasado.
Pérez, según detalló el diario Perfil, ignoró los pasos del Plan de Vacunación que rige a nivel nacional; sacó turno y se inoculó mientras cientos de personas siguen esperando por la vacuna en la CABA. Frente a esto, la titular del ministerio, María Migliore, se enteró de lo ocurrido y lo echó.
Desde la propia cartera aclararon que el ahora exfuncionario tenía que esperar unos días más para que se abriera la inscripción y el cupo que le correspondía por su grupo etario. Aún así, Pérez se vacunó e ignoró las advertencias. Según el propio funcionario, "se la pasa en la calle" y por recorrer lugares vulnerables, necesitaba estar protegido.
Cabe destacar que hace solo dos días, la Ciudad de Buenos Aires habilitó la inscripción de personas mayores de 50 años sin factores de riesgo para que puedan vacunarse contra el coronavirus. Según confirmó el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, no se discriminará según profesión. "Si sos porteño y tenés más de 50 años, todas las inscripciones están abiertas", manifestó. Mientras tanto, la Campaña de Vacunación acelera y el ritmo promedio se mantiene en 300 mil dosis diarias en todo el país.