"Hay una urgencia en los sectores más postergados de la sociedad y es a ellos a quienes estamos dando respuesta", afirmó el presidente Alberto Fernández al explicar las medidas que anunció el Gobierno hoy y que incluyen la entrega de bonos de $ 18 mil para 13 millones de jubilados, monotributistas y trabajadores informales. "Llegar a los últimos es mi mayor obsesión", insistió Fernández y agregó que las medidas se enmarcan en la coyuntura inflacionaria que "tiene un componente autóctono y otro internacional derivado de la guerra desatada en Ucrania". "Todos advertíamos que este conflicto está cayendo sobre todos y también cae sobre la Argentina", afirmó.
Fernández también adelantó que en los próximos días seguirán tomando nuevas medidas para controlar la inflación y aclaró que con estos anuncios "no nos desentendemos de los trabajadores formales" y señaló que en esa materia la Unión Industrial Argentina y la Confederación General del Trabajo están trabajando mediante la reapertura de las paritarias. "Se que estamos avanzando bien y que la semana que viene vamos a tener mas definiciones en las paritarias", opinó. "Vamos ver como actuamos para garantizar que estas definiciones que estamos tomando leguen también a los trabajadores formales", agregó Fernández.
Durante su alocución Fernández inscribió la entrega de los bonos en "la lógica de seguir mejorando la distribución del ingreso en la Argentina" y recordó los anuncios que tuvieron lugar en los últimos días tanto del aumento del 50 por ciento en la Tarjeta Alimentar como del bono para jubilados de 6 mil pesos que anunció junto a la titular de la Anses, Fernanda Raverta. "Lo podemos hacer cumpliendo los objetivos fiscales que nos dimos porque la Argentina está creciendo y podemos financiar todo esto que estamos promoviendo", explicó el presidente.
El modelo argentino -continuó- se funda en tres pilares: la producción, el trabajo y la distribución; este último -señaló de manera crítica- "es donde sentimos que está fallando porque la inflación se come gran parte de los aumentos salariales". El mandatario reafirmó el compromiso que asumió al firmar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y que implica "no llevar adelante acuerdos regresivos", e insistió en que está "cumpliendo" con su palabra.
"Lo hicimos con los jubilados, lo hicimos con la Tarjeta Alimentar, ahora lo hacemos con los trabajadores de la economía popular a los que debemos también potenciar en el esfuerzo", agregó Fernández y se refirió al proyecto que anunció más temprano el ministro de Economía para "gravar con una alícuota sobre las ganancias que las empresas hayan tenido por encima de los mil millones de pesos durante este año". "Necesitamos que los que han ganado inesperadamente como consecuencia de una guerra que se ha desatado un dinero que no tenían previsto que colaboren con su aporte contributivo e impositivo", exigió el mandatario.
Fernández realizó el anuncio junto al ministro de Economía, Martín Guzmán. Entre los presentes estaban el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, y su par de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, junto al jefe de gabinete Juan Manzur y los ministros de gobierno. También estuvieron en Casa Rosada autoridades de la Unión Industrial Argentina y representantes de organizaciones sociales.
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