Ayelén Mazzina pasará a ser la ministra más joven de todo el gabinete una vez que asuma el lugar que dejó la semana pasada Elizabeth Gómez Alcorta, al frente del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad. Con 32 años, Mazzina se desempeñaba hasta este lunes como Secretaria de Estado de la Mujer, Diversidad e Igualdad de San Luis y estuvo a cargo de la organización del 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, trans, Travestis, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries en Territorio Huarpe, Comechingón y Ranquel. Además, fue concejala por la Ciudad de San Luis y profesora de Ciencia Política.
Mazzina ocupaba entonces un cargo que equivalía al de ministra provincial y, en varias entrevistas sostuvo que le gusta que se refieran a ella como "La Ayer, cumbiera intelectual". "Me da risa cuando en reuniones dicen ‘La Aye’ y al lado hay un ministro y a él le dicen ‘ministro’. Y ahí me doy cuenta como cuesta aún la cuestión de los estereotipos, edad y género”, sostuvo en diálogo con Infobae.
En la misma entrevista contó que cuando asumió el cargo en el 2019, llegó a su lugar de trabajo y saludó a cada uno de las personas en su oficina. Y hubo quien se animó a decir “no era lo que esperaba”. De inmediato ella le respondió: “Esta soy yo y no habrá tacos, ni tapados de señora al menos lo que dure la juventud”, contó entre risas.
Mazzina dijo que también y pese a sus responsabilidades -trabaja 24x7- no deja de disfrutar de su vida como joven: “Creo que tenemos que gobernar sin olvidarnos de la edad que tenemos, sin distanciarnos de la gente y sin secarnos por dentro”, agregó
En su vida, contó, sus abuelos fueron muy importantes a la hora de la crianza y, si bien asumió que no tenía lo que quería sino lo que había, dice que hoy valora que en aquellas épocas hubo más amor que dinero: "Tengo firmeza y seguridad de los valores y el amor que me brindaron mis abuelxs (Nelly y Alberto), mi madre (Betty), mi papá biológico (Gustavo) y mi papá del corazón (Mauri). Eso me dio fuerzas para salir a la vida de otra manera. Con muchos miedos porque la sociedad aún hoy es compleja”, reconoció.
Sexualidad y política
En diálogo con Infobae, Mazzina habló sobre su sexualidad, el momento en que descubrió que le gustaban las mujeres y cómo eso potenció su libertad. Contó también que el mensaje no fue bien recibido por su familia, y argumentó que muy conservadora y católica y de hecho entre sus anécdotas contó, entre risas, que hasta el día de hoy su abuela “le sigue pidiendo a Dios que me cure del lesbianismo”.
“Siempre me sentí tan firme en mis decisiones y elecciones de vida que hasta me servían esas palabras para usarlas en los discursos y tratar de hacerles ver que el odio no nos lleva a ninguna parte y que lo que haga en mi cama no es lo que importa. A una persona heterocis no se la cuestiona en su sexualidad porque eso está dentro de lo normado y aceptado socialmente”, confió Mazzina.
Y agregó: "Desde piba siempre hice tareas sociales y comunitarias. Cuando entendí que era lo que quería y que había herramientas para hacer cosas transformadoras empecé a caminar de otra manera. En mi interior sabía que podía lograrlo, pero sabía que en ese momento la sexualidad era un condicionante”.
De allí que expresa un concepto claro que -dijo- sintetiza su vida entera: “El amor humaniza la política, propone transformar realidades. Y la política al amor lo transforma. Para mí no hay política sin amor, y amor sin política”.
Ella se define como “La Aye, cumbiera intelectual” porque “me lo dijeron una vez y me encantó”, aseguró quien ocupa el cargo equivalente al de Ministra.