La ministra de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Diana Mondino, hizo referencia a la posibilidad de que la Argentina se incorpore al BRICS tras la posible determinación del gobierno de Javier Milei de revertir su postura. La funcionaria afirmó que es necesario “estudiar” su nivel de asociación con este foro político y económico de países emergentes. Aclaró que esto dependerá de que el bloque logre establecer un sistema financiero propio.
“Sé que están tratando de abrirse; cuando algunas de estas iniciativas comiencen a concretarse, sin duda tendremos que estudiarlo”, detalló Mondino en referencia a la unión comercial entre Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, según informó la agencia EFE.
MÁS INFO
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
La canciller argentina lo afirmó en el marco de su participación en un evento del laboratorio de ideas indio Observer Research Foundation, donde detalló las reformas económicas llevadas a cabo por el presidente Javier Milei, y resaltó las “oportunidades del nuevo clima de negocios” en el país.
Además, durante su visita oficial, Mondino se reunió con el ministro de Asuntos Exteriores de la India, Subrahmanyam Jaishankar, y con autoridades locales y empresarios con quienes planteó que desde el Gobierno nacional están “más interesados en Mercosur que en convertirnos en un miembro de BRICS”.
La importancia de que Argentina se una a los BRICS
Los BRICS, conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, es una asociación de países en desarrollo y mercados emergentes, que representa el 42% de la población mundial, el 30% del territorio global, el 23% del PIB mundial y el 18% del comercio internacional. Mientras que su crecimiento económico constituye el 50% del crecimiento global, convirtiéndolos en una fuerza significativa de la economía mundial. Desde su surgimiento en 2009, los BRICS se establecieron como un foro para expresar posiciones conjuntas sobre asuntos globales, impulsando reformas al sistema internacional y creando su propio banco de desarrollo.
Para Argentina, ingresar a los BRICS significa la posibilidad de expandir sus vínculos comerciales, aumentar las cantidades exportadas y diversificar los productos vendidos al exterior. A su vez, el ingreso de divisas, en un contexto de restricción externa por la escasez de reservas del Banco Central y la asfixiante deuda con el Fondo Monetario Internacional, podría traer alivio a la economía.
Por otra parte, pertenecer a los BRICS permitiría fortalecer el diálogo con Brasil y, a partir de allí, el MERCOSUR y, en definitiva, reconstituir un eje de integración regional autónomo. Pero el gobierno se empeña, también, en distanciarse de nuestro principal socio comercial. Al parecer, no considera que los países del BRICS representan para Argentina el 30% de sus exportaciones, y son determinantes para lograr mayor intercambio comercial y poder económico regional.
Además, debe considerarse la situación por la soberanía de las Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur y los espacios marítimos correspondientes. En ese sentido, algunos de los países BRICS son miembros del Comité de Descolonización de la ONU, como China, India y Rusia, aliados fuertes en este ámbito. Todos reconocen la soberanía argentina sobre Malvinas y/o exigen el llamado al diálogo para retomar las negociaciones. Se trata de países que apoyan la posición argentina en la Cuestión Malvinas, que son muy importantes en el sistema internacional y que abiertamente lucharon y luchan contra el colonialismo.