Alberto Fernández mantuvo una conversación con su par de la República Popular China Xi Jinping desde su oficina en la Quinta de Olivos. Allí, sentado en su escritorio junto al teléfono, fue fotografiado como suele ocurrir en cada actividad presidencial, lo que permitió visualizar cada detalle de su lugar de trabajo.
El detalle que más llamó la atención de los seguidores en las redes sociales, sin lugar a dudas, fue un curioso cuadro de Dylan que el presidente ostenta en una de las paredes, en el que su mascota fue pintada con un uniforme de granaderos. Si bien fue un regalo que alguna ocasión apareció en Instagram, en esta ocasión renovó el protagonismo entre los seguidores del presidente por el sitio protagónico que ocupa en la decoración.
La historia del cuadro de Dylan
La idea surgió en el marco de la campaña presidencial de 2019. Lisandro Guma, un artista plástico oriundo de Maipú, notó que Dylan, el perro del entonces candidato Alberto Fernández, comenzaba a tomar un protagonismo particular en la carrera electoral y decidió trabajar en un cuadro del collie.
“Tengo cierta inclinación política hacia el peronismo y quería aportar mi arte a la campaña, por eso decidí hacer el retrato”, aseguró Guma a Diarios Bonaerenses. El artista vive en la ciudad de Buenos Aires desde 2003 y se recibió de licenciado en Artes Visuales en la Universidad Nacional de las Artes (UNA).
El artista maipuense tiene un gran afecto por las mascotas y el cuadro de Dylan pertenece a una serie denominada Pet Portraits que realiza desde el año 2018 por encargo. “Se me ocurrió vestirlo de granadero porque si (Fernández) iba a ser presidente Dylan también iba a querer ser guardián. Fue como una especie de metáfora, en un tono simpático”, explicó el artista.
Cuando lo terminó, Guma le sacó fotos y se las envió al senador bonaerense Gervasio Bozzano, también oriundo de Maipú. El legislador le hizo el contacto con el equipo del entonces candidato para que pueda dejar su obra en las oficinas de calle México (en el barrio porteño de San Telmo), en donde hacía base Fernández en tiempo de campaña.
Otros detalles de la oficina presidencial
Además del cuadro de Dylan Fernández en la pared, también hay otros detalles interesantes en la foto de la oficina presidencial. Por ejemplo, el gran cuadro de Perón y Evita abrazados que se encuentra centrado entre dos bibliotecas. La obra que puede apreciarse en el despacho de Olivos es obra de Juan Manuel Núñez Lencinas, un artista nacional y popular de la escuela de Carpani, cuyos trabajos pueden verse en aquí.
El presidente también cuenta con dos muñecos, uno de su persona y otro de su pareja, Fabiola Yáñez. Otro de los distintivos en su despacho es una foto de un emotivo abrazo con Abuelas de Plaza de Mayo.
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